Máquinas virtuales ¿Qué son, para qué sirven y cuáles son los mejores programas para crear una?

¿Alguna vez has escuchado hablar acerca de las máquinas virtuales?. Es un término que es muy interesante y del cual probablemente no tienes suficientes conocimientos si no eres un aficionado a la informática o tecnología en general.

A grandes rasgos, se puede decir que es un software que permite a la persona emular el funcionamiento de un sistema operativo dentro de otro, haciendo creer que es otro ordenador. Es decir, funciona como si hubiese un ordenador dentro de otro. Esto es posible a través de una serie de procesos muy interesantes y que cualquier persona interesada lo puede lograr.

Si te llama la atención y quieres conocer mucho más a fondo sobre esto, a lo largo de este post te explicaremos qué son las máquinas virtuales, cuál es su función, los mejores programas que existen para crear una y todo tipo de aspectos relacionados al tema.

¿Qué es una máquina virtual y para qué sirve en informática?

Su propio nombre hace referencia a su definición, esto quiere decir, que una máquina virtual es un entorno virtual creado por un usuario en el cual es posible la instalación de un sistema operativo sobre el sistema principal de un ordenador. En palabras más sencillas, es como si hubiese un ordenador dentro de otro. Pero es importante aclarar en este punto que todo el procedimiento es emulado, ya que todo se seguirá ejecutando realmente directamente dentro de tu PC.

Realmente el sistema operativo de la máquina virtual es un programa que igualmente se ejecuta en el interior de tu equipo. En este sentido, existen dos tipos de máquinas virtuales que se diferencian por su funcionalidad. Por un lado están las de sistema y por el otro las de proceso. No obstante, la mayoría de las veces que escuches hablar acerca de este tema, posiblemente se estarán refiriendo a las de sistema.

Las máquinas virtuales de sistema emulan a un ordenador completo, es decir, es un software que realmente puede hacerse pasar como un PC. Contiene su propio disco duro, memoria, tarjeta gráfica y demás componentes, a pesar de que todos ellos son virtuales. De esta manera, en este tipo todo funciona como si se estuviese ejecutando en un ordenador normal. Por su parte, se encuentran las máquinas virtuales de proceso las cuales son una versión mucho menos ambiciosa.

En vez de emular un PC por completo, se encarga de ejecutar un proceso en específico, como por ejemplo una aplicación. Es de gran utilidad cuando se quieren desarrollar apps para varias plataformas. Así, en vez de programar específicamente para cada tipo de sistema, el entorno (máquina virtual) es el que se encargará de lidiar con el sistema operativo. Son ideales para disfrutar de aplicaciones que se comportan de la misma manera en diferentes plataformas, ya sea Mac, Windows o Linux.

¿Para qué sirven las máquinas virtuales?

Cuando nos planteamos esta interrogante, la respuesta es muy amplia, debido a que las máquinas virtuales tienen muchos usos. Uno de los comunes es para probar diferentes sistemas operativos, configuraciones o programas con total seguridad para tu ordenador real, ya que si algo falla en la máquina virtual, no afectará al ordenador que la ejecuta.

Aparte de eso, existen otras utilidades muy beneficiosas con respecto al uso de máquinas virtuales. Algunas de ellas son:

• Ejecutar programas antiguos: si por ejemplo quieres disfrutar de algún juego que ha dejado de funcionar en hardware o software moderno, puedes perfectamente ejecutarlo en máquinas virtuales.
• Probar una aplicación en distintos sistemas: si eres programador es primordial comprobar que los sistemas que diseñes o las aplicaciones que crees sean compatibles o funcionen correctamente en la mayor cantidad de sistemas operativos o versiones de cada uno de ellos. Con las máquinas virtuales no necesitas probar en distintos ordenadores, sólo basta con crear máquinas virtuales para cada versión.
• Utilizar programas o aplicaciones disponibles para otros sistemas: este es otro de los grandes usos que tienen las máquinas de este tipo. Si quieres usar una aplicación disponible únicamente para Linux, pero tienes Windows, con este método tendrás solución a dicho problema.
• Aprovechar el dinamismo que ofrecen: son ideales cuando requieres de un extremo dinamismo por lo que son perfectas, por ejemplo, para empresas con servidores web que almacenan multitud de máquinas con las páginas web de sus clientes.

Sin lugar a dudas, tienen muchos aspectos positivos que aportar. Pero no debes olvidar que involucra un esfuerzo adicional por parte de tu equipo principal, por lo que puede que haya consecuencias a nivel de rendimiento. Con esto nos referimos a que emular un sistema requiere de un esfuerzo extra por parte de la PC, lo cual puede ocasionar que la rapidez disminuya un poco.

Sin embargo, con el paso del tiempo se han diseñado aplicaciones para crear máquinas virtuales que han mejorado en cuanto a eficiencia se refiere, aparte de que están especializadas en permitir que el hardware sea más potente.

¿Cuáles son los requerimientos para crear una máquina virtual en mi ordenador?

A pesar de que una máquina virtual es emulada, es necesario que el equipo en el cual se vaya a crear cumpla con una serie de requerimientos mínimos. Así, se logra que todo funcione correctamente y de una manera más fluida.

Veamos cuales son:

• Procesador: debe tener un procesador relativamente potente y debe soportar la tecnología de virtualización. En caso de los procesadores Intel, dicha función se conoce como Intel VT x. En los de AMD aparece como AMD-v. Sumado a eso, debe estar habilitada en la BIOS (o UEFI) del ordenador.
• Memoria RAM: dependerá del sistema operativo que ejecuten en el equipo y en la máquina virtual. Por ejemplo, para ejecutar una máquina virtual de Windows XP en un ordenador Windows 10, con 6 GB es suficiente. Pero esa cantidad puede ser insuficiente si quieres ejecutar una máquina virtual con macOS Sierra en un PC que tenga Windows 10.
• Espacio de disco duro: las máquinas virtuales utilizan una serie de archivos que funcionan como contenedor en el cual se ejecutan. Estos archivos suelen ocupar el mismo espacio en el disco duro que se le asigna al configurar la máquina. Esto quiere decir que si configuras una máquina virtual para que cuente con un disco duro virtual de 20 GB, el archivo contenedor ocupará ese mismo espacio en el disco duro de tu PC. Entonces, debes disponer de un amplio espacio para poder alojar archivos de esa magnitud:

• Tarjeta gráfica: una excelente recomendación es tener una tarjeta gráfica dedicada. Este componente es vital, ya que el sistema real de tu ordenador deberá generar gráficos de su propia interfaz, aparte de los del sistema de la máquina virtual. En este sentido, para que todo fluya de mejor forma hay que contar con un chip gráfico capaz de ofrecerte un buen rendimiento.

Sin embargo, ten presente que los requerimientos pueden variar dependiendo del programa que vayas a utilizar para crear tu maquina virtual.

¿En qué se diferencia un ordenador de una maquina virtual?

Una de las principales diferencias que se pueden apreciar entre una máquina virtual y un ordenador común, es el funcionamiento de ambos. Como las máquinas virtuales son un software emulado, no puede ofrecer el mismo nivel de rendimiento que un equipo físico común.

Sin embargo, es posible crear máquinas de este tipo que ofrezcan un funcionamiento muy fluido y decente. Sólo basta con tener los componentes necesarios para proceder con su elaboración y listo. Sumado a eso, los procesos se ejecutan de forma diferente entre una virtual machine y un ordenador normal. En el caso de una virtual machine, los procesos que se llevan a cabo están limitados de acuerdo a los recursos que se les proporcione.

Finalmente, también se podría decir que gracias al uso de una máquina virtual es posible probar y ejecutar sistemas operativos diferentes a los que ya tiene tu PC instalado. De esta forma, puedes por ejemplo probar un sistema Linux en tu equipo MacOS sin necesidad de desconfigurar el sistema operativo primario.

¿Cuáles son los mejores sistemas operativos para crear máquinas virtuales?

Hay una gran variedad de sistemas operativos que soportan la creación de máquinas virtuales. No obstante, unos son mejores que otros, así como más seguros. La idea es que utilices los sistemas operativos más confiables para evitar inconvenientes en el proceso.

Por ello, te compartimos una lista con los más recomendados para este tema:

• Windows
• GNU/Linux
• FreeBSD
• OS X
• OpenBSD
• OS/2 Warp
• Solaris
• MS-DOS

Cabe destacar que estos están limitados por el propio soporte del software de virtualización que vayas a emplear.

Lista de las mejores herramientas para crear una maquina virtual en Linux, Windows o MacOS

Un punto importante que debes tomar en consideración al escoger una herramienta para crear una maquina virtual es que no todas funcionan de la misma manera.

Por ello, te compartimos una lista con las mejores y más seguras herramientas:

VirtualBox

La primera herramienta que mencionamos en esta lista es VirtualBox, una de las más utilizadas y quizá de las más recomendadas para comenzar. Es un software libre y gratuito con el que podrás instalar una amplia cantidad de sistemas sobre Linux, Solaris, Windows y Macintosh. Uno de los motivos por los cuales se ha vuelto tan popular, es debido a lo fácil que es su descarga. Basta con ingresar a su web y ya puedes tener acceso a él.

Tiene una gran cantidad de funcionalidades y parámetros personalizables, lo cual quiere decir que se ajusta a las necesidades del usuario. Sumado a eso, no es necesario tener un equipo actual, porque funciona muy bien en ordenadores con un hardware un poco más antiguo. Aparte, tiene la capacidad de reconocer la mayoría de dispositivos USB y de ofrecer una biblioteca interesante de guest additions de forma gratuita.

Descargar VirtualBox Windows

Parallels Desktop

Cuando se trata de una excelente herramienta para macOS, sin duda una de las más excepcionales es Parallels Desktop. Tiene un excelente rendimiento y con él puedes crear máquinas virtuales para ejecutar sistemas de Windows. Otra de sus características más interesantes, es que con ella puedes optimizar los recursos del sistema y del hardware, con el objetivo de ofrecer una experiencia más eficiente.

Descargar Parallels Desktop MacOS

VMWare Workstation

Por último, pero no menos importante, está una de las opciones que representa una auténtica referencia en el área. Se trata de VMWare Workstation, la cual lleva casi 20 años en el mercado. Cubre una amplia gama de necesidades que facilitan la vida de los usuarios, ya que no solo permite la creación de máquinas virtuales.

Con la ayuda de esta herramienta, puedes cubrir otro tipo de campos que van más allá de la virtualización. Por ejemplo, podrás configurar y administrar redes virtuales complejas, ejecutar diferentes sistemas operativos paralelamente, e incluso virtualizar tu propio sistema.

Descargar VMWare Workstation Windows