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Si bien es cierto, una red informática hace referencia a un conjunto de dispositivos interconectados entre sí a partir de un medio, por el cual, intercambian información y comparten recursos. Para ello, es importante que existen dos roles bien definidos para los dispositivos conectados, ya que debe haber tanto un emisor como un receptor.
Ahora bien, en el gran ámbito de las redes informáticas, es valioso conocer diferentes términos, especialmente cuando se trata de los dispositivos de conexión. En este punto, entra en juego los famosos “HUB” o “Concentradores” que se tratan de un elemento de hardware capaz de conectar el tráfico de red proveniente de múltiples dispositivos.
Pero, para conocer más a fondo para que sirven estos equipos y cómo funcionan, al igual que cómo se clasifican en el entorno de las redes informáticas y que aspectos tener en cuenta a la hora de montar uno en tu red; te invitamos a leer el presente post. De tal manera, sabrás cómo comprar un HUB ideal para tu tipo de red.
¿Qué es un HUB o concentrador y para qué sirve en una red informática?
Conocido como “Concentrador”, en español, un HUB se define como un dispositivo a través del cual se pueden conectar varios aparatos entre sí con el fin de que logren comunicarse. Es decir que, sirve para interconectar diferentes equipos, tales como: smartphones, tablets, ordenadores, portátiles, TVs, USBs y tarjetas SD, por ejemplo.
Por consiguiente, un HUB o concentrador presenta la capacidad de crear una red de ordenadores conectados entre sí e incluso, brinda la posibilidad de extender la misma a partir de otros equipos similares. Puesto que, el concentrador es una entidad que posee una cantidad de puertos determinada y así, su finalidad se basa en recuperar los datos binarios que acceden por un puerto para emitirlos a las demás entradas.
De tal modo, se ocupa de concretar el tráfico de red existente que proviene de numerosos ordenadores y, a continuación, se encarga de regenerar la señal para todos sus puertos. Esto, independientemente de lo que se encuentre conectado en dichos puertos, debido a que realiza un “broadcast” que consiste en un proceso de recibir un dato y enviarlo a todos.
Ahora bien, es preciso destacar que, un HUB no es lo mismo que switch. En vista de que, un concentrador no es capaz de discrepar si la información que pasa por sí mismo va dirigida a un ordenador u otro, porque solo se limita a recibirla y repetirla. Mientras que, un switch o “conmutador” es la versión inteligente de un HUB y, por eso, logra crear un canal de comunicación para distribuir datos a cada aparato de destino, aparte de que funciona en redes con una mayor cantidad de máquinas.
Tipos de HUB ¿Cómo se clasifican estos dispositivos?
Entre otros detalles, para comprender mejor el funcionamiento de los concentradores en términos de redes informáticas, es relevante saber que existen diferentes categorías o clasificaciones de dichos dispositivos.
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Las cuales, mencionamos a continuación y te enseñamos de que se trata cada una:
HUB Pasivo
Se refiere a un concentrador que, únicamente, envía la señal a todos los hosts conectados sin amplificarla y no requiere de energía eléctrica para operar. Por ende, solo sirve como punto de conexión física y no tiene la capacidad de manipular o visualizar el tráfico que lo cruza, por lo que no incrementa la señal. Generalmente, se emplean para compartir los medios físicos.
HUB Activo
A diferencia de los hubs pasivos, los hubs activos están conectados a una fuente de alimentación eléctrica o a un tomacorriente, pues requieren de energía eléctrica para amplificar la señal entrante, una vez es recibida y antes de ser emitida a los demás puertos. Por consiguiente, es capaz de regenerar y retransmitir las señales de la misma forma que un repetidor. Además, son también conocidos como “repetidores multipuerto”, debido a que cuentan con ocho o doce puertos para poder conectar los equipos de la red.
HUB Inteligente
Tal y como su nombre lo indica, son hubs más avanzados que, aparte de funcionar como un HUB Activo, también cuentan con un chip microprocesador y poseen capacidades diagnósticas. Gracias a esto, resultan completamente útiles en el diagnóstico de fallos. Cabe distinguir que, este tipo de hubs también son denominados “Smart hubs” y, principalmente, se caracterizan por ser mucho más costosos que los hubs activos. Adicional a ello, permiten conectar varios tipos de cables.
¿Qué debo tener en cuenta al elegir el mejor Hub para montar mi red?
Para determinar cuáles son los aspectos claves a tener en cuenta antes de comprar un HUB o concentrador, primero que todo, es fundamental establecer el uso que se le desee dar a este dispositivo de red informática. Pues, todo dependerá de ello para estudiar las alternativas disponibles y saber escoger entre ellas. Una vez tengas claro los usos que quieras darle a este nuevo aparato, puedes comenzar a centrarte en ciertos aspectos de gran interés para lograr adquirir el mejor concentrador en torno a tu experiencia de usuario.
Entre dichos aspectos, resaltamos los siguientes:
- Compatibilidad: Por supuesto, es esencial verificar que el concentrador de redes informáticas que quieras adquirir, tenga compatibilidad con tus otros dispositivos electrónicos. Es decir que, pueda conectarse con tu smartphone, portátil o TV, por ejemplo.
- Tipo de entradas: Dependiendo de los tipos de dispositivos que necesites conectar, tienes que centrarte en adquirir un concentrador que logre adaptarse a dichas entradas para aprovechar su funcionamiento. Ya sea LAN, USB, HDMI, Type-C, etc. De lo contrario, no podrás emplearlo para conectar lo que necesitas.
- Variedad de puertos: En los concentradores, mientras más puertos tenga mayor será su capacidad. Por lo tanto, en la medida de lo posible, trata de seleccionar un HUB con varios puertos o entradas.
- El precio: Uno de los factores más importantes a valorar antes de comprar un HUB, sin duda, es el coste. Esto, variará según la marca que decidas adquirir y los puertos que el mismo incluya. Por lo general, su precio fluctúa entre los 10 y los 60 euros.