Lo Último en IP@P
- Goblin Mine: La Estrategia Económica Detrás del Juego de Minería que está Fascinando a Todos
- Estos son los nuevos Cargadores UGREEN: potencia y portabilidad en dos versiones que no te puedes perder
- UGREEN Nexode Pro: El Cargador Ultradelgado que revoluciona la carga de dispositivos móviles
- La computación en la nube está transformando los juegos Online y estas son sus grandes ventajas
- Actualizaciones del Programa de Afiliados de TEMU: ¡Hasta MX$500,000 al mes!
Para muchos usuarios, especialmente los más nuevos en el tema de Linux, es difícil manejar ciertos aspectos del sistema operativo como, por ejemplo, la instalación de nuevo software ya que en muchos casos no saben dónde buscarlos.
Por este motivo, todas las distribuciones de Linux cuentan con depósitos en línea de aplicaciones llamados repositorios, que están repletos de aplicaciones optimizadas para cada distribución, y cuentan con métodos simples y seguros de descarga e instalación.
En los próximos párrafos te enseñaremos paso a paso cómo acceder a estos repositorios y desplazarte por ellos para obtener las aplicaciones necesarias para el uso que desees darle a tu terminal Linux.
¿Qué son los repositorios y para qué sirven estos servidores en Linux?
En su concepto más simple, un repositorio es un sistema accesible a través de internet que aloja cientos de softwares diseñados para funcionar de forma general con todas las distribuciones Linux, o con una distribución específica. Cada distribución Linux cuenta con su propio grupo de repositorios, en los cuales podemos encontrar grandes cantidades de programas que podemos descargar e instalar en nuestro ordenador.
Además de los propios repositorios de cada distro, tenemos también la posibilidad de instalar y utilizar repositorios de terceros con versiones más actualizadas de algún software que estemos usando, o que no haya sido añadido en el repositorio de la distro. Si bien estos depósitos de softwares contienen todos los programas que podríamos necesitar, Linux requiere el uso de un gestor de paquetes, el cual nos permitirá instalar las aplicaciones descargadas.
¿Cómo funcionan los repositorios y cuáles son los principales usos que se les dan?
Lo que se debe comprender sobre los repositorios es que no solamente contienen los programas necesarios para el sistema operativo, también gestionan la información adicional necesaria para que estos funcionen. El uso principal de estos archivos es brindar al usuario el acceso a las aplicaciones y programas necesarios para desempeñarse en su ordenador, por medio de un canal seguro y con garantía de compatibilidad y funcionamiento, en el caso de los repositorios nativos de cada distribución.
Estos repositorios preinstalados son gestionados por dos grandes grupos: la comunidad de Software Libre y el personal creador y gestor de la distribución, de manera que los paquetes que ingresan estos repositorios están testeados y son completamente seguros y compatibles. Incluso tratándose de repositorios de terceros, todos los programas que se añaden a un repositorio pasan por un largo y riguroso proceso de testeo antes de ser aprobados, por lo que un repositorio es una fuente segura de la cual obtener un programa.
Además de eso, facilitan en gran medida el proceso de actualización de programas, ya que, por lo general, los repositorios notifican cuándo se lanza la actualización de un programa instalado, por lo que podremos adquirir fácilmente la nueva versión por medio de nuestro gestor de paquetes. En comparación con otros sistemas operativos diferentes de Linux, los repositorios presentan una única desventaja, y es que para poder instalar un programa o actualizar el sistema operativo, es necesario estar conectado a internet.
Esto es así porque, si bien muchas acciones pueden ser realizadas offline, para instalar un nuevo programa es necesario descargar la totalidad de sus dependencias, y esto puede llevar un tiempo muy largo. Esto bien podría considerarse un inconveniente menor, ya que son pocos los lugares donde no hay conexión a internet, pero para algunos usuarios esto puede representar aún un problema, aunque es uno que desaparecería por completo si se implementará de forma general el uso de repositorios como Snap o Flatpak.
Te enseñamos cómo añadir repositorios en Linux Debian de forma fácil como todo un experto
Debian es una de las distribuciones más antiguas de Linux, y aún continúa firmemente como una de las mejores, ya que, además de que se mantiene en constante actualización, ha servido de base para muchas otras distribuciones. Todas las distros basadas en Debian, y Debian en sí misma, gestionan los programas instalados por medio de Advanced Package Tool (APT).
Un gestor de paquetes que revisa los programas y sus dependencias antes de instalarlo. Esta distribución cuenta con varios repositorios, pero siempre existe la posibilidad de que el programa que buscamos no se encuentre en ninguno de ellos.
Más en Software
- ¿Cómo copiar una fórmula en una hoja de cálculo de Microsoft Excel sin errores? Guía paso a paso
- ¿Cómo hacer que Discord no se inicie automáticamente en Windows 10? Guía paso a paso
- ¿Cuáles son los mejores programas gratuitos para editar vídeos sin marca de agua? Lista 2024
- ¿Cuales son las mejores herramientas para proteger y cifrar un documento en PDF? Lista 2024
- ¿Cuáles son las mejores plantillas de PowerPoint gratis para descargar online? Lista 2024
SÍGUENOS EN 👉 YOUTUBE TV
Para estos casos, tendremos que instalar nuestros propios repositorios, y existen dos métodos para hacerlo en Debian:
Desde la Shell
Para agregar repositorios con este método, no hace falta más que añadir los códigos de los repositorios deseados en la lista que veremos en la ubicación /etc/apt/sources.list.
Donde cada elemento está conformado por tipo de paquete, dirección web, distribución y secciones, organizados de la siguiente manera:
[code]Deb [servidor] [nombre del servidor] [sección del repositorio][/code]
.
Con esto en mente, estos son los pasos necesarios para añadir repositorios en Debian mediante Shell:
- Ingresa a la lista de repositorios ubicada en
/etc/apt/sources.list
con un editor de texto. Puedes acceder a ella desde la terminal usando el editor Nano. - Escribe un nuevo elemento en la lista describiendo los repositorios con la sintaxis que vimos anteriormente. Por ejemplo
deb http://deb.debian.org/debian stretch wine
. - Guarda el documento y reinicia el ordenador.
Una vez el ordenador inicie nuevamente, tendremos el nuevo repositorio listo para descargar e instalar los softwares que necesitemos. Puedes realizar este proceso varias veces para ir añadiendo nuevos repositorios.
Desde el administrador de paquetes
Este método se mezcla un poco con el anterior, ya que necesitarás el formato del repositorio para poder añadirlo.
Para este método, solo hará falta ingresar a los ajustes de Linux y abrir el gestor de paquetes, de esta forma:
- Busca la aplicación desde la barra de búsqueda de Debian y ábrela.
- Sigue la ruta
Ajustes > Repositorios
. - En esta sección, selecciona "Otro software", y presiona "Añadir" para agregar el nuevo archivo
- Ingresa la fuente del repositorio siguiendo el formato del primer método, y luego presiona "Añadir fuente"
Si todo fue hecho correctamente, el nuevo repositorio estará instalado y preparado para utilizarse. Podrás seguir instalando repositorios y complementándose con los de Debian para poder acceder a una gran variedad de paquetes.