¿Cómo apagar o reiniciar mi Raspberry Pi de forma correcta? Guía paso a paso

Los dispositivos Raspberry son una maravilla para los desarrolladores, estudiantes y profesionales de la tecnología. Simplifican el trabajo a un precio reducido. Sin embargo, esto tiene algunas “letras pequeñas” en cuanto al cuidado del equipo, que es más frágil de lo que se piensa.

Como te habrás dado cuenta, esta placa no tiene un botón de apagado o encendido y esto es un problema para los novatos y personas confiadas que piensan que desconectar la alimentación es una buena idea.

Te diremos las razones por las que debes apagar correctamente tu equipo Raspberry y qué debes hacer, paso a paso, para garantizar que el proceso de apagado sea seguro.

¿Cuáles son los riesgos más peligrosos de apagar o reiniciar una Raspberry Pi de forma incorrecta?

Lo primero que debes recordar, es que el sistema operativo en los equipos Raspberry se instalan en una tarjeta Micro SD, que no es más resistente que el resto de las tarjetas que hay en el mercado, por lo que requiere de mucho cuidado.

Revisa esta lista de los potenciales riesgos de apagar incorrectamente una Raspberry, sea cual sea el modelo que tengas en tus proyectos:

• Pérdida de datos: cuando se habla de datos, se habla de todas las configuraciones, ficheros y procedimientos con los que se ha trabajando con una Raspberry. Lo más probable, es que lo que se pierda primero sean los últimos datos almacenados y modificados.
• Corrupción de ficheros: una cosa es que los datos desaparezcan y otra es que estén allí, pero queden inutilizados. Esto ocurre por variaciones en la alimentación directa en el equipo. Por esta razón, siempre se recomienda el uso de sistemas UPS y reguladores de voltaje cuando tengas un proyecto realmente importante en desarrollo.
• Daños en la tarjeta Micro SD: los fabricantes aseguran que las tarjetas son altamente resistentes a golpes, incluso resistentes al agua, pero no recomendamos hacer un test de resistencia. La tarjeta Micro SD, cuando se utiliza en Raspberry, trabaja en exceso y es probable que debas cambiarla una vez al año debido a su fragilidad.
• Daños en los componentes Raspberry: el procesador, la memoria RAM y los chips integrados a la placa pueden verse afectados por una alteración en la alimentación directa. Aunque la placa no se va a quemar por desconectar el cable alimentador, puede que no funcione correctamente cuando vuelvas a encender el computador.
• Demoras en tu proyecto: si tú eres el autor principal de un proyecto, sabrás lo importante que es cuidar del trabajo que realizas. Un descuido en la forma de apagar una Raspberry puede generar pérdida de tiempo valioso y retrasos en el cumplimiento de metas.
• Pérdida de dinero: aunque los equipos Raspberry son accesibles económicamente, cuando una placa se daña debes reemplazarla por completo y eso requiere de una nueva inversión de dinero. Si apenas eres emprendedor o entusiasta, sabrás que eso implica el uso de recursos que seguramente no tienes a la mano.

Aprende paso a paso cómo reiniciar o apagar tu monoplaca Raspberry Pi de forma correcta y sin riesgos

Aunque no lo creas, los equipos Raspberry están diseñados para permanecer horas, días y semanas encendidos. Incluso, cuentan con una alimentación vía USB para que no haya un recalentamiento tan rápido en la placa. El procesador y el chip ethernet son los componentes que más se calientan en una placa Raspberry y en el mercado hay disipadores de calor que pueden mejorar su rendimiento. Sin embargo, es poco probable que haya problemas por altas temperaturas cuando dejas conectado el equipo.

Aun con esta explicación, si tienes dudas sobre cómo cuidar tu Raspberry y necesitas apagar el mini computador, solo debes seguir estos sencillos pasos:

Desde la consola de comandos

Como es bastante frecuente que realices proyectos sin el apoyo de un monitor, es mejor que aprendas a utilizar la consola de comando que viene por defecto en el sistema operativo Raspberry PI OS, que se denomina Bash.

Una vez que hagas la conexión SSH y tengas acceso a tu Raspberry, escribe estas líneas de códigos en la consola:

• sudo shutdown -h now: Al escribir estas líneas, se ejecutan una serie de pasos a seguir y que son vistas en la misma consola de comandos.

• SIGTERM: esta es la orden que el computador emite para que todos los procesos guarden información y comiencen a cerrarse.
• SIGKILL: el resto de los procesos que están en ejecución se detendrán. No quedarán procesos activos en este punto.
• SYSTEM HALT: es la advertencia de la consola de comandos que dirá que el sistema se ha detenido por completo.

Después de finalizar estos pasos, ya puedes proceder a la alimentación de tu equipo Raspberry Pi, en cualquiera de sus versiones, debido a que ninguna de ellas viene con un botón incorporado.

Desde el escritorio

Cuando utilizas una Raspberry como un mini computador de sobremesa, es más sencillo realizar el proceso de apagado de forma segura.

Solo debes seguir los siguientes pasos:

• En la parte superior e izquierda, ubica el logo de Raspberry, que en realidad es un botón que despliega el menú.

• Busca y selecciona el botón “Shutdown”.
• Espera a que finalicen los procesos que no son visibles como en el caso de la consola de comandos.

• El computador te dirá cuando debas desconectar la alimentación.

Es importante resaltar que, mientras el hardware recibe alimentación, permanece encendido, aunque con un mínimo de procesos activos.

Reiniciar una Raspberry

La única forma que existe de encender un dispositivo Raspberry es conectando la alimentación mediante el puerto USB-c, que es el único que funciona para permitir el paso de electricidad. Tomando en cuenta este fundamento, la única forma de reiniciar el mini computador es realizando todos los procesos que hemos estado explicando en este artículo para apagar correctamente el equipo, retirar el cable alimentador, y volver a conectarlo. Solo así se realiza un reinicio seguro.

Recuerda que estos aparatos son de bajo coste y se utilizan para distintos proyectos de tecnología, por lo que no es conveniente que todos ellos sean fabricados como si el único propósito sea servir de computador de sobremesa para usuarios finales.