¡Terrible idea! Uber planea un servicio de taxi para niños que tendría infinidad de cosas mal

La empresa de movilidad Uber anunció que planea implementar un servicio para niños, que los podría trasladar a la escuela o a otros lugares donde los padres necesiten enviarlos. Desde hace algún tiempo, habilitaron los asientos de seguridad y los planes son expandir la alternativa a todas las ciudades donde prestan el servicio.

Aunque la idea pueda parecer buena para algunos, hay un sinfín de cosas que deben ser analizadas y estudiadas por los padres, que al final de cuentas son los que deben tomar la decisión de si los chicos utilizarán el servicio. A pesar de que en las políticas de la empresa están prohibidos los viajes sin acompañantes, hay trabajadores que los han realizado por petición de los representantes.

Uber quiere crear un servicio de taxi para niños

Un cambio en las políticas de funcionamiento de Uber permitiría que los niños viajen sin acompañantes en los autos que sean contratados por los padres. Al parecer, hay familias que andan en búsqueda de este tipo de servicios, debido a sus ocupaciones o poca disposición de tiempo para llevarlos a la escuela, a cumplir con las tareas con sus compañeros o a cualquier actividad extra que realicen.

Uber plans a kids service to replace mom and dad’s taxi. What’s wrong with that? Plenty https://t.co/rieGsh9ovK

— 🇺🇦Evan Kirstel #B2B #TechFluencer (@EvanKirstel) December 23, 2022

El jefe de Uber en Australia, Dom Taylor, contó en una entrevista que muchas personas le preguntan si en algún momento se tendrá un servicio especial para los niños. Su respuesta es que primero se deben estudiar algunas condiciones de seguridad y brindar las garantías necesarias para que los padres confíen en los conductores.

Un mujer llamada May Ng está convencida que lo utilizará con sus hijos cuando tengan ocho años. Piensa que es necesario que se garantice la comunicación con el conductor en cualquier momento y que se tenga la posibilidad de realizar un seguimiento por GPS. Otros son más cautos y piensan que es una decisión que se debe pensar bien, evaluando todos los escenarios implicados.

De acuerdo con un estudio realizado en Australia, un 62% de los padres respondió que nunca utilizarían este tipo de servicio para movilizar a sus hijos sin su compañía. Los autores indicaron que esta disposición permite realizar labores de planificación además de buscar formas de fomentar y apoyar los medios de transporte seguros. La pregunta que surge es ¿Por qué los representantes siente recelos de estas iniciativas? Seguidamente se analizan los motivos.

¿Qué hay de malo en la iniciativa de Uber? Infinidad de cosas

Antes que Uber lance con éxito el servicio para los niños, debe superar los inconvenientes que se atraviesan en el camino. El estudio citado arriba, destaca varios factores que influyen en el punto de vista de los padres. Uno es las posibilidades tecnológicas para comunicarse con los niños mientras van en el camino; segundo, desconocer la ruta que tomará el coche y tercero, quien recibirá al menor al llegar a su destino final.

Aunque los padres estén muy ocupados, entregar la seguridad de sus hijos a un conductor desconocido no es una buena idea para la mayoría de ellos. Sería como contratar una niñera sin saber nada de ella. Les da algunos beneficios, pero les genera un alto grado de ansiedad que no se elimina fácilmente. En muchos casos se plantean sistemas de vigilancia frecuente, que por otro lado, traen al debate el tema de la privacidad.

Igualmente está el tema de la movilidad. En caso de un accidente, no es la misma atención que prestaría el padre o un acompañante designado, que el conductor del coche. Según las cifras de la UNICEF, cada año en el mundo mueren cerca de 220.000 niños producto de colisiones en la carretera. Probablemente con un poco de atención y cuidado las cifras podrían ser menores. Pero además, hay asuntos sociales que deben ser considerados.

No se puede dejar de lado la dependencia que se crearía en los coches. Para los chicos es necesario desarrollarse en un ambiente abierto, en el que tenga comunicación con otros e interactúen para formar su personalidad. Trasladarse en solitario dentro de un taxi a la escuela los priva de esa posibilidad. Van en camino con una persona adulta a la que no han tratado, a diferencia de los autos escolares o de transporte público, donde tienen la oportunidad de ver a distintos tipos de personas.

Además, es probable que este tipo de servicios masifiquen las diferencias económicas. No todo el mundo tendrá acceso a pagar un servicio de esa clase, por lo que quizá los más adinerados tendrán prioridad. Promovería la desigualdad social e iría en contra de las estrategias de convivencia ciudadana, que son tan necesarias especialmente en los primeros años de la vida.

Al final de cuentas, aunque el servicio parece ser una solución a un problema cotidiano, tiene muchos puntos internos que deben ser analizados, sobre todo vinculados con la relación que deben mantener los padres con los hijos y la decisión de confiar la vida de los menores a personas desconocidas. Sin embargo, hay quienes están dispuestos a utilizarlo y no es de extrañar que en algún momento se active en las ciudades grandes.