¡Que empiece el duelo! Mozilla planea demandar a Google por prácticas anticompetitivas que "mataron" a Firefox

A través de TechCrunch, el pasado 22 de septiembre, Mozilla publicó un nuevo informe que intenta documentar como Google y otras compañías han ejercido su influencia sobre sus usuarios para beneficiar su propio ecosistema de aplicaciones y en especial, su navegador. De diferentes formas, han dificultado el cambio a otro navegador deliberadamente, a través de una fuerte integración con los principales sistemas operativos. Como consecuencia, Firefox se ha esfumado del espacio web y por ello, planea demandar a la gran G por prácticas anticompetitivas.

Según señala el equipo de Mozilla, miles de millones de personas en el mundo son dependientes de los sistemas operativos de las empresas de tecnología más grandes, las cuales proporcionan sus propios navegadores y de alguna manera, restringen la funcionalidad de los navegadores rivales. Esto genera una gran limitación para los consumidores, quienes pierden la capacidad de determinar sus propias experiencias online y aparte, reciben productos pocos innovadores en muchos casos.

Mozilla culpa a Google de la desaparición de Firefox

El pasado 22 de septiembre, por medio de TechCrunch, se conoció que Mozilla responsabilizó a Google de la desaparición de Firefox a causa de sus practicas anticompetitivas. A lo largo del informe, la compañía intenta documentar como los de Mountain View han ejercido su influencia sobre los internautas para beneficiar su propio ecosistema de aplicaciones, en especial, su navegador Chrome.

Tal y como señala el equipo de Mozilla, Google fabrica el navegador Chrome para dispositivos Android. Así, cada vez que un usuario intente acceder a Google a través de un navegador que no sea Chrome, le solicitan que descargue este último para tener una experiencia de navegación calificada. Lo cual, hace parte de una estrategia que les ha resultado exitosa, pero que es una ventaja injusta frente a terceros. Como el caso de Mozilla, la cual no tiene este tipo de atracción sobre los usuarios, porque no cuenta con un sistema operativo de su propiedad.

Por consiguiente, señalan que las prácticas anticompetitivas que siempre se han mantenido en el espacio web y en el de los navegadores, se han convertido en un problema. Por defecto, los usuarios se vuelven adeptos a Chrome y esto parece ser normal ante el mundo, per la realidad es que el mercado establecido se torna muy hostil para los nuevos competidores.

De la misma forma, Mozilla resalta que Google no es la única responsable de la desaparición de Firefox, pues Apple y Microsoft también tienen mucho que ver. De manera predeterminada, Apple fabrica Safari para MacOS e iOS, así como Microsoft posee el navegador Edge para los equipos Windows. En consecuencia, tanto Google como Apple y Microsoft son quienes han conducido a los usuarios a sus navegadores por medio de una fuerte integración y un sinfín de avisos que, persuasivamente, ayudan a evitar la conversión por parte de los internautas.

“Ninguna de las plataformas móviles facilita el cambio de navegador predeterminado. Además, la familiaridad con su marca por parte de los usuarios ejerce su propia pegajosidad que desalienta a los consumidores a buscar alternativas más pequeñas y menos conocidas”.

Equipo de Mozilla.

En el campo de los navegadores web, Mozilla no es un espectador porque desarrolla Firefox y cuenta con el sustento del motor Gecko. Esta experiencia le ha permitido profundizar en una investigación que analiza las estrategias que utilizan los sistemas operativos para ejercer influencia sobre los consumidores y mantener los bloqueos en el uso de sus propios navegadores. Así, resalta que recurren a métodos hostiles para que las personas se vean obligadas a recurrir a sus propios navegadores de marca. Por ende, no ofrecen la opción de buscar y emplear nuevas opciones independientes.

Aparte de esta desventaja, Mozilla también tiene otro punto en contra: Es un desarrollador de software libre sin fines de lucro y no opera como una competidor comercial. Como consecuencia, sigue siendo desvalido en términos de participación de mercado, el cual está dominado por Chrome de Google y Safari de Apple, así como por la infraestructura de los motores de navegación Blink y Webkit.

Chrome no es el único respaldado por el motor de navegación Blink, ya que este también potencia a Microsoft Edge.

Más allá de la ventaja “injusta” que tienen las otras compañías en términos de navegadores web, sus tácticas astutas para promocionar sus navegadores entre los usuarios no son las más calificadas, según Mozilla. Debido a que, tanto Google como Safari y Edge utilizan frases para desalentar activamente la descarga de otras alternativas que pueden ser nuevas para los usuarios menos avanzados. Por ejemplo, la configuración recomendada de navegador en Windows empuja a los usuarios a seleccionar Edge como el navegador predeterminado y lo peor de todo, es que muestra el siguiente mensaje “¿Sigues usando Firefox? Microsoft Edge está aquí”.

En consecuencia, este informe es una muestra de lo que Mozilla ha tenido que afrontar a lo largo del tiempo, lo cual ha empeorado con los años. Dichos ejemplos, los ha utilizado como una manera de llamar la atención de los reguladores, para impulsar la intervención de este tipo de prácticas. En vista de que, aunque la visibilidad y el alcance de los bloqueos por los sistemas operativos es cada vez mayor, la diversidad en términos tecnológicos es cada vez menor y eso resulta preocupante para garantizar libertad a los consumidores.

Las prácticas de Google no solo afectaron Firefox; también limitan las opciones del usuario

Si bien, Mozilla ha publicado este informe porque se han visto directamente afectados por la desaparición de Firefox, pero también es una alerta que demuestra las notables limitaciones que tienen los internautas a causa de ello. En su investigación, Mozilla recalca que la competencia en el mercado de navegadores también es vital para garantizar la innovación y la elección de los consumidores.

En efecto, si no existe una competencia justa que permita que los navegadores web menos reconocidos puedan emerger, la sociedad en general sufrirá. Con esta realidad, los usuarios no solo pierden la capacidad de establecer sus propias experiencias en línea, sino que también se ven obligadas a recibir productos menos innovadores y hasta de poca calidad. De manera que, tienen que conformarse con lo que brindan las mismas soluciones de siempre, sin poder apreciar nuevas experiencias para realmente saber qué les gusta o que requieren en función de sus necesidades.

Ahora bien, más allá de la satisfacción de sus gustos, los usuarios pueden verse obligados a aceptar peores resultados de privacidad. Aunque son alternativas que mucho tiempo de trayectoria que deben mantenerse capacitadas, lo cierto es que son los principales blancos para los ciberdelincuentes, así que no están exentas de presentar brechas de seguridad y desmejorar la privacidad que ofrecen a sus adeptos. Sin embargo, si existe una competencia entre los navegadores independientes, esto podría cooperar en la implementación de nuevas funciones y la innovación en áreas como la seguridad y privacidad.

“Miles de millones de personas en todo el mundo dependen de los sistemas operativos de las empresas de tecnología más grandes. Existen innumerables ejemplos de navegadores independientes inhibidos por los sistemas operativos en de los que dependen”.

Equipo de Mozilla.

Por su parte, esta disyuntiva muestra que los consumidores estadounidenses están atrapados en los valores predeterminados de los sistemas operativos. A partir de una encuesta realizada a más de 6.000 personas, hallaron que los internautas de USA tienen menos probabilidades de saber cómo instalar navegadores en dispositivos portátiles y teléfonos inteligentes. A causa de ello, también son incapaces de cambiar la configuración predeterminada del navegador.

Según destacan, alrededor de un tercio de los encuestados de Estados Unidos, informaron sentirse incómodos o muy incómodos al descargar e instalar o cambiar el navegador predeterminado en su dispositivo.

Con todo esto, Mozilla planea abrirle los ojos al mundo ante una realidad que es preocupante. Aunque no revela sus recomendaciones con respecto a las intervenciones regulatorias, demuestra que es momento de obligar a estas plataformas a actuar de una manera más pertinente, en pro de garantizar verdaderos beneficios tanto a los consumidores como a los desarrolladores. De tal modo, insta a los legisladores para evitar más daños a los internautas por el gran estancamiento competitivo y la continua inacción que existe en el campo de los navegadores web.

Como consecuencia, la Unión Europea comenzó por tomar medidas antimonopolio con respecto a las restricciones de contrato de Android de Google. Dichas reglas, ahora obligan a que estos sistemas presenten una pantalla de elección a los consumidores europeos, para poder seleccionar el motor de búsqueda predeterminado (como mínimo). Sin embargo, según la investigación de Mozilla, las soluciones que se han implementado han tenido muchas limitaciones y han fallado notablemente, hasta ahora. Por ende, no se sabe como actuará el mercado estadounidense después de esto.

“Hacemos un llamado para que hagan cumplir las leyes que ya existen. Donde faltan leyes y reglamentos, pedimos que se introduzcan y que se destaque su importancia para el futuro de Internet. Los reguladores, formuladores de políticas y legisladores pueden aprovechar este momento para crear una nueva era en la historia de Internet, en la que los consumidores y desarrolladores se beneficien de opciones, competencia e innovación genuinas”.

Equipo de Mozilla.