¡Sobrepasan los límites! Webs de declaración de impuestos comparte información de ingresos de usuarios con Meta alrededor del mundo

Cada día se conocen nuevas formas en que se utiliza la información privada y los datos personales que facilitan los usuarios a distintas organizaciones. Esta vez, un reporte del portal The Markup señala a tres servicios de declaración de impuestos en los Estados Unidos que proporcionan los datos financieros de los contribuyentes a Meta.

El proceso ocurre por intermedio de Pixel, un código que Meta proporciona de forma gratuita a todas las empresas y organizaciones que deseen agregarlo a su portal con la finalidad de mejorar la estrategia de marketing digital. Sin embargo, lo que logra es recopilar una gran cantidad de datos de cada persona que pasa por allí, con lo que se conocen sus gustos e intereses.

Plataformas de declaración de impuestos comparte información económica de los usuarios con Meta

Las tres empresas señaladas de entregar datos a través de Meta Pixel son H&R Block, TaxAct y TaxSlayer. Sostienen los investigadores que aparte de suministrar información relacionada con el correo electrónico y nombres, también proporcionan los fondos que se obtienen durante el mes, bien sea por concepto de becas universitarias o de otros reembolsos económicos.

The biggest online e-filing services—namely H&R Block, TaxAct, and TaxSlayer—have been sharing sensitive user financial information with Meta, according to a new report.https://t.co/24wU6Qbtgx

— Ars Technica (@arstechnica) November 23, 2022

Según las cifras oficiales, estos servicios procesan al año alrededor de 150 millones de declaraciones tributarias que se envían con el uso de medios electrónicos, muchas de las cuales provienen de profesionales. Por lo visto, la información es compartida con Meta sin importar que la persona tenga o no un perfil en alguna de las redes sociales, lo que pone en riesgo la privacidad de los involucrados.

Uno de los casos analizados en el reportaje es el de TaxAct. Cuando una persona va a tomar el servicio, debe llenar un formulario con la cantidad de dinero que gana y las devoluciones que recibe. La plataforma asegura tener tres millones de suscriptores y al profundizar en la investigación, se comprobó que estos datos recibidos son facilitados a Meta y a Google por intermedio de una herramienta similar.

De inmediato, a través de uno de sus portavoces, la empresa respondió a las acusaciones e indicaron que son respetuosos de la privacidad de los clientes y que cumplen al pie de la letra las regulaciones previstas en los códigos de ética. Además, destacaron que revisan y evalúan con frecuencia sus prácticas para asegurarse de que no violan las condiciones establecidas en su portal.

Así mismo, el reporte también sostiene que algunos de los prestadores de servicio compartieron información con los ajustes de Píxel mientras que otros lo hicieron sin darse cuenta. Por eso recomiendan a quienes usan la aplicación asegurarse que la configuración sea correcta y no utilizar en todos los casos la que trae por defecto.

¿Para qué le interesa a Meta saber cuánto dinero ganas?

El objetivo de Meta al recopilar la mayor cantidad de información posible de los usuarios es mejorar su algoritmo y de esa manera ofrecerles anuncios que les interesen. De nada vale que una empresa gaste millones de euros en publicidad si al final estos no van dirigidos a la audiencia adecuada. Por esta razón existen los formularios que se deben llenar para conocer lo mejor que se pueda a los clientes.

La estrategia que utilizan se conoce como ingeniería social y en el fondo el objetivo que persigue es convencerte de que les des información a cambio de utilizar el servicio sin pagar. Todos dicen que es para protegerte y que nadie tendrá acceso a lo que tú les entregas. Pero ya sabemos que en realidad eso no es así y que cuando hay dinero de por medio se les olvida el compromiso que hicieron contigo o al menos lo justifican con algunas palabras que están en la letra pequeña.

Al momento que Meta conoce cuánto ganan sus usuarios, sabrá a qué segmentos dirigir determinados anuncios. Hay productos muy costosos que cualquier persona no puede comprar, pero si la promoción se dirige al público correcto, las ventas aumentan y eso le da satisfacción a la empresa que lo distribuye. Es una reacción en cadena que al final beneficia a la red social, pues las ganancias por estos conceptos siempre se mantendrán altas.

Several companies are waving the red flag 🚩 on using the Meta Pixel tracking function due to a series of possible data breaches – particularly in the healthcare industry. Read a breakdown on the issue ➤ https://t.co/vPAmzJg1MD

— Black Kite (@BlackKiteTech) November 23, 2022

Pero además, a mayor información mejor se perfecciona el algoritmo. Con la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, identifica de manera precisa los intereses, metas y prioridades que tiene un usuario. Lo conoce de tal forma que solo le envía contenido que le interesa, lo que aumenta la cantidad de tiempo que pasa frente al dispositivo y es otra estadística que se vende a los anunciantes para indicarles que su inversión no será en vano.

Cada vez que se crea una cuenta nueva en cualquier red social, lo primero que se debe completar para obtener un perfil es un formulario en el que se solicita una amplia gama de datos. Comienzan con los básicos, como el nombre y el apellido, pero de allí avanzan hasta la orientación sexual, las afinidades, las aficiones, viajes, gustos culinarios, tendencia política, poder adquisitivo y muchas cosas más.

Por regla general, no hay una protesta por ello, puesto que es la única forma de obtener el perfil. Muchos omiten parte de la información y proporcionan lo estrictamente necesario. Pero en algunos momentos te avisan que es conveniente que lo completes para tener una mejor experiencia, aunque en realidad es porque les beneficia a ellos como compañía. El interés es meramente económico.

Aunque muchas personas se muestran preocupadas por el destino que tendrá su información, las lagunas que existen en las leyes y los contratos de servicio que todos aceptamos sin leer en la mayoría de los casos, da la potestad a las empresas de manejar los datos a su conveniencia. Cada vez que ocurre un escándalo, sus portavoces se limitan a decir que las acusaciones carecen de veracidad, por lo que no hay más nada que hacer.