¡Insólito! Planean exigir KYC a los usuarios que deseen hacer staking de Ethereum y cargarse su privacidad en Estados Unidos

Los planes del gobierno de Estados Unidos para regular las criptomonedas cada día toman más fuerza. A mediados de septiembre, presentaron el “primer marco integral para el desarrollo sustentable de activos digitales” y ahora, según un nuevo informe, una de las medidas que se podría implementar en Ethereum es el KYC o verificación de identidad.

Desde hace un tiempo, el Fondo Monetario Internacional ha solicitado que se aclare la figura que utilizan los activos digitales, en la búsqueda de que se unifique un criterio para evitar las actividades delictivas. Posición similar mantienen las entidades bancarias y ahora, con la fusión de Ethereum, hay funcionarios que solicitan que estos proyectos sean considerados valores y que, por lo tanto, se sometan a las legislaciones vigentes.

Planean exigir KYC a los stakers de ETH en Estados Unidos

Hay una declaración que es el punto de partida para esta posibilidad. La realizó a mediados de septiembre la Comisión del Mercado de Valores de los Estados Unidos, al asegurar que la mayoría de los nodos de Ethereum están en este país y que, por lo tanto, se podría concluir que las operaciones se realizan en su territorio. Aún así, falta ver si en los tribunales se mantiene la misma postura, aunque hay expertos que consideran que el factor de la ubicación es irrelevante.

It’s very likely that regulators in the United States will begin telling node validators to impose KYC and AML requirements on users who stake Ether.https://t.co/6qUoWrLr1b#ethereum #crypto

— Crypto News (@coin_news_globe) October 16, 2022

En medio de todo, en caso de ratificar un juez esta aseveración, es probable que se exija a los validadores de Ethereum que soliciten la Verificación de Identidad (KYC) y la Prevención del Blanqueo de Capitales (AML). Esto significa que para realizar una transacción, el usuario tendrá que proporcionar información relacionada con su lugar de residencia y otros datos personales para constatar que no se trata de un individuo peligroso o una organización criminal.

La medida tiene dos caras de acuerdo con la óptica con la que se le mire: para los inversores, puede darles más confianza para invertir en este proyecto, puesto que sabrán quién está detrás de cada uno de los movimientos, lo que haría que se proyectarán nuevos negocios. Sin embargo, para las empresas, significaría exponerse a sanciones por determinadas cuentas que violen los pasos o que suministren información falsa o incompleta.

La preocupación de los organismos por las cifras altas de dinero que circulan sin ningún tipo de regulación es frecuente. Pero apenas este tema comienza y se tiene que esperar cuál es la línea que van a tomar los acontecimientos. Sin embargo, la fusión de Ethereum ha abierto el camino para que los entes oficiales les coloquen la lupa y podrían frenar un poco el que otros proyectos dejen a un lado la minería para convertirse en PoS.

Una medida que se cargaría toda la privacidad blockchain

La mayor preocupación por la implementación de la verificación de la identidad viene por el tema de la privacidad de las personas que están detrás de las cuentas. Es cierto que hay grupos e individualidades que las utilizan con fines de extorsión, secuestro o para participar en actividades ilícitas. Pero en todos los casos no es así y el hecho de que los datos lleguen a las autoridades o a las bolsas de criptomonedas implicará no saber el uso que estos harán a largo plazo.

Aparte, uno de los elementos que ha marcado las criptomonedas desde su nacimiento es la descentralización. Es decir, nadie tiene control absoluto sobre ellas, los ordenadores están repartidos por todo el mundo y no hay un único dueño de los movimientos. Al regularse, es posible que se conviertan en instituciones como los bancos tradicionales, en el que cada quien debe aportar su información para que se almacene en una base de datos.

Si bien muchas empresas y proyectos prometen manejar los datos privados con cuidado y resguardarlos con seguridad, la mayoría de los usuarios prefiere no tomar riesgos. Tal vez, influya las acciones que toman los hackers, quienes de un momento a otro secuestran la información al conseguir una vulnerabilidad en el sistema. Solicitan enormes cifras para devolverla y al final no hay la certeza de que el procedimiento sea transparente.

Las esperanzas parecen estar centradas en la implementación en el corto plazo de la Web3. Según el analista John Henderson, la solución sería agregar un sistema llamado zkKYC, con el cual los usuarios le podrán suministrar alguna información sobre ellos a las compañías, sin que esto implique entregar los datos personales. Eso podría ser suficiente para combatir, por ejemplo, el lavado de dinero o el blanqueo de capitales.

Henderson sostiene que la mayor ventaja es que, en caso de ocurrir un hackeo, no se llevarían los datos personales de ningún usuario. Pero cree que todavía hay mucho que trabajar y es un tema que se debe manejar con seriedad por parte de todas las empresas involucradas en el blockchain, para lograr que a la larga cada uno de los productos financieros sean útiles.

Lo cierto es que estos procesos de verificación de identidad forman parte de las entidades financieras tradicionales desde hace años. Es verdad que no eliminan por completo los riesgos de que se produzcan actos ilícitos, pero con el pasar del tiempo se han ido ampliando las capacidades gracias al trabajo de expertos en la materia. Y aunque para muchos puedan parecer burocráticos y engorrosos, al final terminan aportando seguridad a los usuarios.

Con todo esto, el asunto de la privacidad vuelve al debate. El derecho de cada quien de saber qué se hace con sus datos y de tomar la decisión de si los provee o no en el ámbito criptográfico también estará en discusión. Pero lo cierto es que el tema de las regulaciones gubernamentales, probablemente cambie en algunos aspectos la forma cómo hasta ahora se han visto los activos digitales.