¡Nuevo objetivo! Afirman que deberíamos planear una misión tripulada a Venus antes que a Marte

Las agencias espaciales no descansan en su afán por conquistar nuevos espacios. Es cierto que la mayoría de los esfuerzos han estado centrados en Marte, pero ahora, desean enfocarse en el llamado planeta gemelo de la Tierra, es decir Venus. Una de las misiones está programada para el 2030, en un viaje que durará 15 meses.

La propuesta de cambio de ruta fue presentada en la edición digital del periódico The Guardian. Allí, el doctor Noam Izenberg del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins, expresa que deben colocar a Venus como un objetivo adicional en el camino espacial de la Luna y Marte. Piensa que es necesario salir de la cuna y entrar de una vez por todas en el universo exterior.

La ciencia pone el ojo en Venus como destino de una misión tripulada

Los científicos dieron sus declaraciones en el marco del Congreso Astronáutico Internacional que se desarrolló en París la semana pasada. El argumento es que como Venus está más cerca de la Tierra que Marte, una misión tripulada podría arrojar información relevante en menor tiempo y proporcionar datos importantes que podrán utilizarse en el futuro.

Several uncrewed missions will study Venus in the next decade. But now some scientists want to send a crewed mission there as well for a flyby. Is that a good idea?https://t.co/gDUB2L7CB9

— IFLScience (@IFLScience) October 4, 2022

Las diferencias son grandes. Una misión a Marte tardaría un promedio de tres años, mientras que a Venus sería uno solo. En esos meses, los astrónomos podrán explorar el espacio profundo y adquirir nuevos conocimientos. La desventaja es que tendrían que enviar a robots, puesto que para los humanos es imposible llegar hasta allá.

Los científicos creen que con una misión tripulada se podría saber si hay vida microbiana en Venus y a la vez, profundizar en las razones por las que el calor es tan fuerte y abrasador. El primer intento se realizará de la mano de la empresa Rocket Lab el año próximo, la cual superará a SpaceX al ser la primera en llegar a otro planeta. Hay que esperar si los planes salen como aparecen en el papel.

Aparte, se piensa que un sobrevuelo tripulado permitirá evaluar los niveles de gravedad, lo que les ayudaría a buscar algunas alternativas para acortar las distancias de la nave que partirá a Marte. Este tipo de propuestas no tienen el apoyo de muchas personas, aunque hay algunos que se comienzan a sumar, como por ejemplo el economista jefe de la NASA, Alexander Macdonald.

Venus; una auténtica freidora en la que la vida es imposible

Venus está mucho más cerca del sol que de la Tierra, por eso recibe el doble de calor. La temperatura es tan alta que es capaz de derretir plomo, por lo que es imposible que el ser humano llegue hasta allá y la posibilidad de encontrar alguna bacteria son casi nulas. Algunos estudios aseguran que es producto del efecto invernadero y del cambio climático.

Se calcula que la temperatura promedio es de 462 grados Celsius, aunque puede tener algunas variaciones. En cuanto a tamaño y masa es muy similar a la Tierra, pero la atmósfera es diferente, ya que está compuesta de dióxido de carbono y nitrógeno, porque la mayoría del hidrógeno se evaporó.

El clima es muy constante la mayor parte del tiempo, lo que incluye las noches. Tarda 243 días en girar sobre sí misma. Pero, hay un detalle importante relativo a la inclinación con respecto al sol. En Venus es solo de 3,39 grados a diferencia de los 23,4 que tiene la Tierra, por lo que la rotación es completamente diferente.

A lo largo de los años se han realizado intentos por explorar Venus. En las décadas de 1960 y 1970, la NASA planteó que enviaría algunos astronautas allí, pero después de investigaciones se dieron cuenta de que era ilógico. Sería enviar personas a que simplemente murieran en otro planeta, cosa que no tiene sentido. Por eso, todo lo que se sabe es gracias a la exploración que han efectuado los expertos.

La mayor cantidad de investigaciones las realizó la Unión Soviética. Lanzaron una serie de misiones bajo el nombre de Venera que no pudieron sobrevivir. Una vez que pisaban la superficie, terminaban calcinados casi que en el acto. En ese instante se perdía la conexión, pero por lo menos fueron capaces de enviar algunas imágenes que se preservan hasta la actualidad.

La primera que envió fotografías a la Tierra fue la Venera 9, sin embargo, la más popular fue la 13, que fue capaz de capturar imágenes a todo color. En marzo de 1982 aterrizó en la zona sur del planeta y pudo enviar mucha información que fue guardada de inmediato en el centro de control. Después, fue arrasada por las enormes y calurosas temperaturas.

Por esas razones hay muchas dudas de que sea viable invertir grandes cantidades de dinero en un experimento que se sabe no funcionará. Aunque algunos piensan que es probable encontrar formas de vida, la composición de las nubes en base a ácido sulfúrico es catastrófica. Por ello, el doctor William Bains, del Instituto de Tecnología de Massachusetts, dice que todas las reacciones químicas que se han estudiado son demasiado débiles y que si por casualidad existiera algún microbio, no tendría capacidad de sobrevivir. No tienen con qué comer, ni cómo resistir la contaminación y las temperaturas.

A pesar de que las condiciones no están dadas y de que probablemente sea otro derroche de dinero, ninguna de las misiones previstas se detendrá. El esfuerzo por buscar lo desconocido puede más que solucionar los grandes problemas que tiene la Tierra.