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A partir de 2020, se comenzó a cobrar en el Reino Unido un impuesto a los servicios digitales. Algunas de las empresas que están incluidas en el paquete se relacionan con redes sociales, comercio electrónico y motores de búsqueda. En ese grupo se encuentran las estadounidenses Amazon. Facebook y Google, entre muchas otras.
Según un reporte del diario The Guardian, publicado este martes, los organismos ingleses comienzan a percibir los beneficios y la recaudación ha superado las expectativas iniciales. Desde el principio los gigantes se han quejado del nuevo impuesto, mientras que los especialistas consideran que no conlleva una disminución notoria en sus ganancias y que además no perjudicará los costos finales que pagará el consumidor.
Los gigantes tecnológicos han tributado más de 300M€ a los gobiernos europeos
El reciente informe publicado por la Oficina Nacional de Auditoría (NAO) del Reino Unido, indica que la recaudación por concepto de impuestos digitales pagados por las grandes empresas tecnológicas corresponde a 300 M€. En el grupo están incluidos Google y Apple, además de otras compañías de mediano y gran tamaño que hacen vida en la región europea.
UK’s digital services tax reaps almost £360m from US tech giants in first year https://t.co/yMj5zrGptg
— Guardian Tech (@guardiantech) November 23, 2022
Los voceros indicaron que la cifra es superior en un 30% a las estimaciones iniciales que habían plasmado como meta para el periodo 2021. Ahora las expectativas son más elevadas para 2025, fecha en la que se estima que los ingresos aumenten 10 veces. La ley incluye en el grupo de declarantes a todas las empresas que tienen una recaudación mayor o igual que 500 M€ y que hayan recibido al menos 25 M€ en el Reino Unido.
Las condiciones establecen que el impuesto se aplica a los ingresos netos obtenidos por intermedio de la publicidad digital al igual que por conceptos de comercio electrónico. De acuerdo con las ganancias brutas, tienen que pagar un 2% a las autoridades británicas. Según las estadísticas oficiales, 18 empresas hicieron sus declaraciones y un 90% de lo recaudado proviene de las cinco principales, mientras que hay alrededor de 100 que son revisadas con la finalidad de que comiencen a tributar.
Según varias fuentes, antes de entrar en vigencia este nuevo mecanismo, los tributos que pagaban los gigantes tecnológicos era pocos debido a que trasladaban los beneficios a lugares como Irlanda y Luxemburgo, donde los impuestos son menores. Ahora todos tienen la obligación de realizar una declaración real, ya que el monitoreo es frecuente y las multas por incumplir conllevan pagos con retroactivos.
¿Cuánto ha recaudado España con la Tasa Google?
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Ya se van a cumplir dos años desde que entró en vigencia el Impuesto a Determinados Servicios Digitales o "Tasa Google" como también se le conoce en España. En el fondo, la intención es gravar a las compañías que venden publicidad en línea, que son intermediarios o que transmiten datos. Para calificar deben tener un importe neto igual o superior a 750 M€. De allí se les impone una cuota de un 3%.
¿Qué falló en la 'tasa Google'? Este impuesto temporal ha ido perdiendo adeptos a raíz de la falta del efecto recaudatorio previstohttps://t.co/NWMgwidKIf
— Vozpópuli (@voz_populi) November 15, 2022
Todos los involucrados están obligados a realizar su declaración al final de cada trimestre. Durante el primer año que se implantó, la recaudación estuvo muy lejos de lo que habían previsto las autoridades. Aun así, los planes son recibir una mayor cantidad de dinero al finalizar el año 2023. Hay que recordar que en conjunto, existe el Impuesto sobre las Transacciones Financieras, el cual tampoco ha cumplido con las expectativas.
Lo que planteó Hacienda para 2021 por concepto de la "Tasa Google" fue recaudar 968 M€, pero al final se quedaron solo con 240 M€. Los especialistas concuerdan en que el principal fallo estuvo en los parámetros de aplicación, como por ejemplo la temporalidad del mismo y la falta de medidas para la regulación internacional. Estos inconvenientes han llevado a que muchos se planteen si en realidad es conveniente mantenerlo en el tiempo.
En la actualidad, el gravamen se encuentra activo en Austria, Francia, Hungría, Italia, Polonia, Portugal, España, Turquía y el Reino Unido. Hay otros países que estudian la posibilidad de implantarlo, si bien se trata de una medida temporal mientras se alcanza un acuerdo general que aplique a todos los miembros de la Unión Europea con la finalidad de vigilar el comportamiento en materia económica de las empresas tecnológicas.
A nivel español, la tasa tendrá como fecha de caducidad el último día del año 2023. Fue un acuerdo después que el gobierno estadounidense decidiera colocar un impuesto de un 25% a productos textiles, de calzado y cristalería. Las acciones se congelaron siempre y cuando se diera muerte al tributo adicional sobre las empresas tecnológicas. De esta forma, por la conveniencia para ambas partes se decidió eliminar.
Es bueno recordar que la aplicación de esta tasa llevó a que se realizarán acusaciones de que Hacienda espiaba a los ciudadanos. La única forma de saber el alcance de las tecnológicas y lo que debían pagar, era conociendo la localización que tenían los usuarios y al comprobar que estuvieran dentro del territorio español.
Para saber la ubicación precisa podían valerse de las redes WiFi, GPS, GSM o Bluetooth, aparte de cualquier otra combinación tecnológica existente. No importaba que fuera un turista que estuviera en el territorio. Si veía un anuncio, este se sumaba a la cuenta y la empresa tenía que incluirlo en su cuota de tributos. Muchos se quejaron de que era una violación a la privacidad, sin embargo, estuvo ajustado a la legislación correspondiente.