En Europa investigan practicas de monopolio con los navegadores web para smartphone de Google y Apple

La Unión Europea busca mantener a raya el funcionamiento de las grandes empresas tecnológicas. Esta vez, la investigación apunta al desempeño que tienen los principales navegadores web, auspiciados por Google y Apple, ya que al parecer mantienen un monopolio que impide la presentación de innovaciones por parte de pequeños desarrolladores.

Es oportuno recordar que esta semana se presentó el Centro Europeo para la Transparencia Algorítmica, el cual vigilará que se cumpla la Ley de Servicios Digitales que comenzará a aplicarse a partir de 2023. En la organización trabajarán en una primera instancia 10 especialistas y la meta es a futuro ampliar la cantidad de empleados, de acuerdo con las plazas que se abran.

UK investiga el dominio de los navegadores web para móviles de Apple y Google

La investigación que se adelanta en el Reino Unido corresponde a la Autoridad de Mercados y Competencia, como parte de las políticas antimonopolio. El periodo que se tomará en cuenta es a partir de junio del presente año, época en la que se presentó un informe sobre la situación que se palpaba de forma específica en los dispositivos móviles.

Las autoridades de Reino Unido investigan a #Apple y #Google por #duopolio en sistemas operativos, cloud gaming y navegadores de dispositivos móviles. https://t.co/eCJGfDYrfn

— Geeknetic (@Geeknetic) November 22, 2022

En el informe presentado, se indicó que el duopolio que mantienen Apple y Google los lleva a bloquear la competencia, lo que impide que nuevos actores surjan en el mercado de las comunicaciones. Indicaron que tomarían las acciones que fueran necesarias para que se cumpla la ley y es lo que buscan con la investigación anunciada el pasado martes.

Según la directora ejecutiva de la CMA, Sarah Cardell, los desarrolladores del Reino Unido y otras empresas tecnológicas les dicen que las restricciones que establecen Google y Apple les impiden mantener sus innovaciones. Al parecer, el problema principal viene al momento de ejecutar juegos, ya que para que estos funcionen en los navegadores se deben desarrollar aplicaciones adicionales que implican un gasto no previsto en la estructura de costos.

Ante los señalamientos, ambas empresas expresaron sus puntos de vista. Google aseguró que los desarrolladores tienen la posibilidad de utilizar el navegador que prefieran, ya que están comprometidos a brindar las herramientas que les permitan crear negocios exitosos. Por su lado, Apple comentó que van a trabajar en conjunto con la CMA para explicar las potencialidades que tiene a la mano y en especial el trabajo que realizan para cuidar la privacidad de los usuarios.

La Unión Europea no deja de tocarle las narices a las grandes tecnológicas

La Unión Europea tiene rato en una fuerte lucha contra las principales empresas tecnológicas estadounidenses. Hace algún tiempo, a través de un comunicado, el Departamento de Comercio de Estados Unidos dijo que se quería castigar a quienes han contribuido económicamente a la recuperación del continente. Y de seguro todo se acentuará con la puesta en marcha de la Ley de Mercados Digitales.

📰Ha entrado en vigor la Ley de Servicios Digitales, un 🆕 conjunto de normas de la UE para un entorno en línea más seguro y responsable. Se aplica a los #serviciosdigitales 🧑💻📲 que conectan a consumidores con bienes, servicios o contenidos.

Más ℹ️: https://t.co/9Vd8aL711r.

— Europe Direct CLM (@europedirectCLM) November 17, 2022

En este 2022, las demandas y las restricciones contra Google y Apple han estado a la orden del día. El 14 de septiembre se conoció que Google deberá pagar una multa de 4.1 B€ por el monopolio que ejerce en los dispositivos Android. El proceso había comenzado en 2018 con el alegato de que exigen a los fabricantes que instalen su navegador como predeterminado, si bien en todos los casos las condiciones no son iguales. La sentencia indica en uno de los párrafos que es necesario mantener una competencia leal en el ámbito comercial.

En enero, Francia impuso una multa millonaria a Google y Facebook debido al uso de las cookies y las dificultades que tienen los usuarios para rechazar las que consideran inconvenientes. Se les dio un plazo para que realizaran los arreglos pertinentes y en caso de incumplir tendrían una pena de 100.000 € por cada día de retraso. Ambas empresas aseguraron que trabajarán en las mejoras y que colaborarán con las autoridades correspondientes.

Otra multa a la que se enfrenta Google, y que es considerada una de las más grandes de la historia, se relaciona con los negocios publicitarios. Los investigadores de la Unión Europea sostienen que los coloca en una posición ventajosa con respecto a la competencia, por lo que solicitan el pago de 4 B€. De aprobarse, sumarán 8 B€ por sanciones en la última década en el viejo continente. Los resultados de esta averiguación se conocerán a comienzos del 2023, si no se llega a un acuerdo satisfactorio en los meses por venir.

Un camino similar ha tenido que transitar Apple en 2022 en el territorio europeo. Uno de los golpes más duros es la inclusión del puerto USB-C en los iPhone a partir 2024. La razón es que deben adaptarse a los estándares internacionales y que la conexión diferente lleva a que los usuarios tengan que comprar distintos cargadores. En el caso de los dispositivos pequeños que forman parte de su stock, tendrán la opción de utilizar un formato que se adapte a su diseño y funcionalidad.

Así mismo, en mayo fueron acusados de limitar las formas de pago a los desarrolladores de aplicaciones. Muchos se quejaron de que la principal billetera disponible es Apple Pay, aunque existen muchas otras opciones en el mercado y con menor margen de comisiones. La compañía refutó y dijo que es una de las alternativas que tienen a disposición. Sin embargo, es utilizada por 2.500 bancos y unas 250 empresas financieras. La multa que podrían enfrentar por este inconveniente es de un 10% de sus ingresos del año pasado.

Queda en evidencia con los datos presentados que los gigantes tecnológicos tienen que pagar enormes cantidades de dinero con frecuencia en Europa debido al estricto seguimiento que se les realiza. Caminan sobre una delgada línea en la que una violación de las legislaciones de cualquiera de los países significa ir a los tribunales y en caso de perder, cancelar las multas impuestas.