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Este miércoles, investigadores del Departamento de Salud de la Universidad de Oxford dieron a conocer los resultados de un análisis que demuestra los efectos que el alcohol tiene en el envejecimiento de las personas y se suma al de Global Burden of Diseases el cual aseguró que desacelera el crecimiento del cerebro, en especial a los menores de 40 años.
Este tipo de investigaciones siempre han representado un desafío debido a que no se cuenta con métodos que sean totalmente confiables para medir los niveles de envejecimiento del cuerpo. Sin embargo, esta vez se estudió el comportamiento de 245.000 personas del Reino Unido.
Nuevo estudio afirma que el alcohol acelera el envejecimiento
En el comunicado de prensa de la Universidad de Oxford, publicado por Molecular Psychiatry, se indica que tras finalizar el análisis genético llegaron a la conclusión de que el alcohol consumido en exceso afecta de forma directa la extensión de los telómeros, esas secuencias especiales que se localizan en los extremos de los cromosomas con la misión de impedir que se rompan o se dañen.
La investigación sugiere que los telémetros acortados son factores de riesgo relacionados con el Alzheimer, cáncer, problemas coronarios y otras enfermedades vinculadas a la edad. Son considerados indicadores de envejecimiento porque se pierden entre 50 y 100 bases de ADN cuando una célula se replica. Al acortarse excesivamente, el proceso de división de las células se detiene y estas mueren.
El enfoque genético utilizado para analizar a los participantes es la aleatorización mendeliana. Después de finalizar el estudio los investigadores hicieron algunas comparaciones. Por ejemplo, una persona que consume más de 29 unidades a la semana, puede experimentar un envejecimiento superior a dos años que uno que no tiene este hábito, si se toma en cuenta la longitud que tienen los telómeros del individuo.
El 51% de los analizados fueron hombres y el resto mujeres, con una edad promedio de 57 años.
El Dr. Richard Piper, director ejecutivo de Alcohol Change UK, declaró que el estudio demuestra los vínculos claros que existen entre consumir licor y envejecer rápidamente. Aseguró que hay un grupo de científicos cada vez más grande dispuestos a mostrar los muchos problemas de salud que causa junto a muertes prematuras que se pueden evitar.
El alcohol ya tiene demasiadas cosas en contra ¿Por qué no prohibirlo?
Según la Organización Mundial de la Salud hay más de 2.300 millones de consumidores de alcohol en el mundo, de ellos, 237 millones de hombres tienen trastornos relacionados con el abuso de las bebidas al igual que 46 millones de mujeres. Hay cosas que pueden hacer los gobiernos para frenar el exceso, pero también hay mucho dinero de por medio, que afectaría las recaudaciones de impuestos y otras actividades.
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Cada vez son más los estudios que demuestran que abusar del alcohol es una mala decisión. Un proyecto financiado por la Fundación Bill y Melinda Gates asegura que en 2020 1.340 millones de personas en el mundo consumieron bebidas alcohólicas en exceso, la mayoría de estos son hombres entre 15 y 39 años, quienes se vieron involucrados en accidentes automovilísticos, lesiones y homicidios.
La Dra. Emmanuela Gakidou, profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, asegura que los jóvenes no deben beber para cuidar su salud, si se toma en cuenta la evidencia presentada. No se encontró ningún beneficio asociado a la ingesta de alcohol en menores de 40 años, aunque en los mayores ayuda a reducir el riesgo de una enfermedad cardiovascular o diabetes.
Por otro lado, también se presentaron las conclusiones de un estudio realizado en primates no humanos, el cual asegura que abusar del alcohol ralentiza el crecimiento del cerebro en los adolescentes y adultos jóvenes. Por cada gramo consumido, la tasa de desarrollo de la masa gris bajó 0,25 milímetros por año.
El profesor Christopher Kroenke asegura que el estudio no deja dudas de que el cerebro crece menos cuando se actúa sin moderación en el tema del alcohol, pero también pierde tamaño en algunas áreas desarrolladas, lo que dificulta la toma de decisiones. La ventaja es que si se detiene el consumo, es posible que exista una recuperación, todo ello en un proceso a largo plazo según la Doctora Tatiana Shnitko.
Ahora mismo, se estudia también si a largo plazo el consumo excesivo de alcohol afecta las funciones mentales de los involucrados, especialmente la de los jóvenes, que se encuentran en una etapa donde tienen que ajustarse y adaptarse para asumir las responsabilidades que conlleva la vida adulta.
Hay iniciativas importantes que promueven la disminución del consumo del alcohol, que según la Organización Mundial de la Salud causa cada año la muerte de 3 millones de personas. Los países europeos consumen 50% más que los de otros continentes, lo que ocasiona mayores problemas de violencia, lesiones y angustias mentales. Tal vez haga falta mayor concientización y formación.
Ese es uno de los motivos por los que cada 15 de noviembre se celebra el Día Sin Alcohol, que pretende hacer reflexionar sobre el efecto social que tiene el abuso de las bebidas, pero también los daños físicos y psicológicos que produce en las personas. Hay que recordar que en el siglo XX el alcoholismo fue declarado una enfermedad y que desde 1935 funciona la Sociedad de Alcohólicos Anónimos, como una forma de ayudar a quienes no pueden desatarse de este mal.