¡Otro juicio más! Texas demanda a Google por haber recopilado datos biométricos de millones de personas sin permiso

Según un reporte publicado por la agencia de noticias AFP, Google fue demandado por el estado de Texas, debido a que utilizaron con fines comerciales la información personal que recabaron a través de las diferentes aplicaciones que forman parte de la plataforma. La respuesta de la empresa es que la acusación no tiene fundamento.

No es la primera vez que Texas demanda a Google, ya lo hicieron en una anterior oportunidad. Igualmente sucedió con Facebook, red a la que denunciaron por el mal uso que realizaban de la herramienta de etiquetado de fotos. Todas las acciones son en base a una ley aprobada en 2009 que prohíbe la recopilación de datos biométricos sin el consentimiento previo.

Google es demandado por recopilar millones de datos biométricos

La demanda fue presentada este jueves en el Tribunal de Distrito del Condado de Midland en Texas, según lo expresó el fiscal general Ken Paxton mediante un comunicado de prensa. El texto dice en parte que es una práctica que se ejecuta desde 2015 y que con la misma Google ha obtenido ganancias. Los productos que se emplearon en la violación fueron Google Fotos y Assistant al igual que Nest Hub Max.

Texas demanda a @Google por recopilar datos biométricos.

La denuncia asegura que Google utiliza aplicaciones de fotos, videos o de comandos de voz para compilar -sin consentimiento- datos biométricos con fines comerciales. #DW

— Dereck Blanco (@dereckblanco) October 21, 2022

En el texto que sustenta la demanda, se explica la razón de cómo cada una de las aplicaciones contribuyó a que se cometiera el ilícito que se establece en la ley relacionada con el uso de datos biométricos que está vigente en Texas, uno de los pocos estados con este tipo de medidas. Explican que hubo una recopilación indiscriminada de archivos de voz y reconocimiento facial.

Uno de los primeros casos que se cita es el de Google Fotos, el cual según los demandantes escanea todo tipo de imágenes para identificar y categorizar a las personas sin que estas lo sepan o den el respectivo consentimiento. Y en lo relacionado con Nest Hub Max, la pantalla inteligente comercializada por la empresa, es señalada de observar y emparejar las caras que reconoce.

Google aseguró a través de un portavoz que apelará la demanda y peleará en los tribunales por sus derechos. Así mismo, sostuvieron que se tergiversa la orientación de sus productos, ya que estos servicios se pueden desactivar de forma fácil si el usuario no desea utilizarlos y que bajo ningún concepto son utilizados con fines publicitarios. Sin embargo, las aclaraciones finales se realizarán en el juicio, en el que ambas partes tendrán oportunidad de presentar sus alegatos.

No es la primera multa de Google por violar la privacidad de sus usuarios

Las acusaciones a Google de violar la privacidad de los usuarios son frecuentes en distintos lugares del mundo. Quienes sienten vulnerados sus derechos, se organizan y van a los tribunales para solicitar indemnizaciones contra el gigante tecnológico. Solo que no son procesos fáciles y normalmente pasa mucho tiempo antes que se produzca un veredicto final.

En el 2018, agencias de consumidores de la Unión Europea aseguraron que Google rastrea de forma permanente el comportamiento de millones de personas, aun cuando existía una configuración de privacidad que lo impedía. El argumento era que se violaba el Reglamento General de Protección de Datos al motivar a los internautas a que activaran el historial de ubicación y la actividad realizada con diferentes aplicaciones.

Arizona es otro de los estados que ha interpuesto recursos en contra de Google. Tuvieron que pagar 85M€ por una acusación de utilizar los datos recopilados de los usuarios para enviar publicidad personalizada. El basamento estuvo en la Ley de Fraude al Consumidor y el punto clave fue el registro del historial de búsqueda de cada usuario. Por esa misma época, representantes de Texas, Indiana y Washington fueron a los juzgados por causas similares.

Más adelante, en 2021 recibieron una demanda por recopilar los datos desde el navegador Google Chrome, aun cuando se utilizaba el modo incógnito. Los acusadores pidieron 5.000 M€ en indemnizaciones por los daños que les ocasionaron tales medidas. La compañía alegó que avisan en todo momento las acciones que realizan al navegar, sin embargo, para los jueces esto no fue válido y dieron curso a la petición.

Un poco más cerca, en enero del 2022, el fiscal general de Washington Karl Racine presentó una demanda por publicidad engañosa, al informar a los seguidores que si cambiaban la configuración de privacidad controlaría los datos a los que podía acceder la empresa. Aseguró que la vigilancia permanente que realizan produce beneficios económicos, lo que es una violación a la intimidad de las personas. Este es un esfuerzo junto a otros políticos que tiene la finalidad de responsabilizar a la compañía de los perjuicios que cause a terceros.

Y así son muchos los casos que se encuentran de formas como Google al parecer viola el derecho a la seguridad y privacidad de las personas que utilizan sus servicios. En algunos procesos la empresa logra evadir las responsabilidades o demostrar que lo que hacen está en las políticas de uso que todos aceptan al crear una cuenta y que pocas veces leen en su totalidad. Pero en otras más, tienen que pagar altas sumas de dinero por los descuidos al momento de cumplir las leyes de cada país.

Ahora sigue en curso el proceso de Texas, el cual apenas está en sus primeros pasos y se prolongará hasta que llegue la fecha del juicio. Lo más seguro, es que mientras pasan los días, Google busque la forma de pulir sus normas de privacidad, para evitar así que las personas se apeguen a cualquier vacío legal para instaurar demandas.