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La idea de conseguir taxis totalmente autónomos es una realidad, los mismos son llamados robotaxi y ya son usados por muchas empresas automovilista en los Estados Unidos, y una de las ciudades que más tiene coches de estos tipos es San Francisco, aunque su uso es limitado y, a pesar de que su tecnología ha sido mejorada, siguen presentando algunos inconvenientes.
No hay dudas de que grandes empresas tecnológicas como Google consideran que los robotaxis son los automóviles del futuro, los cuales no requieren de un humano para su uso, pero lo cierto es que las dos grandes industrias encargadas de ellos invierten sumas de dinero muy altas para desarrollarlos y colocarlos en marcha, y existen muchas dudas sobre si realmente son rentables o si se dirigen a una muerte anunciada.
La tecnología detrás de los Robotaxis mejora y los hace menos rentables
A pesar de que los robotaxi son verdaderamente los coches del futuro y cuentan con una tecnología de última generación, y que ha sido mejorada recientemente, lo cierto es que cada vez pueden resultar menos rentables para las compañías a cargo de ellas. Es así como muchas de estas empresas automovilistas han perdido dinero con los viajes,
Hay que tener presente que la principal fuente de ingreso de estos vehículos es la venta de la tecnología que usan y no los pasajeros, por lo que transportar o no personas podría no tener tanta importancia para ellos. Es así como a medida que pasa el tiempo y su uso empieza a hacerse presente en más países, muchos inversionistas dudan de que tan rentable económicamente sean.
Si bien esto significa una nueva forma de viajar para las personas, las empresas automovilísticas los empiezan a ver de una manera diferente y la causa de esto es que los inversionistas han gastado mucho dinero en ellos para eliminar el costo de los conductores, pero los mismos presentan fallos que confirman que no son totalmente autónomos como se piensan.
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La tecnología de los robotaxi se ha mejorado en repetidas ocasiones, pero no es suficiente para que los mismos puedan valerse por sí solos, ya que se considera que de igual manera se necesita la mano de obra de una persona en algunos casos. Uno de los ejemplos más recientes de esto, ha sido protagonizado por una joven de San Francisco, Estados Unidos.
En este caso, la joven contó cómo fue su experiencia a bordo de uno de estos coches, fue así como al momento de montarse su puerta no quedó bien trancada y durante el viaje se percató de ello, por lo que tuvo que volver a abrirla y trancarla para que quedara bien ajustada. De inmediato, dijo que escuchó una voz por medio de un parlante donde le pedían disculpa por lo de la puerta
De manera que alguien se podría bajar y dejar la puerta abierta por completo, el robotaxi no está en la capacidad de lograr cerrarla por sí sola, por lo que obligatoriamente se necesitaría a una persona para que haga el trabajo. Este tipo de ejemplos, claramente dejan en evidencia que la mano de obra humana es necesaria.
“La economía es fantasiosa. Conseguir el modelo de negocio correcto va a ser muy importante y promete ser aún más difícil que la tecnología”
Williams Riggs, profesor asociado de la Escuela de Administración de la Universidad de San Francisco
Durante los últimos dos años, las grandes empresas automovilísticas han tenido que hacer varias mejoras sobre la conducción autónoma, esto los ha llevado a gastar más de 100.000M€ en ellos, una suma de dinero muy alta que, si bien, lograría ser recuperada, podría llevar más tiempo de lo imaginado.
De acuerdo con Sara Nicolás, principal responsable de asuntos externos de Goggo Networks, existe un conjunto de detalles a tener presente cómo la tecnología para alcanzar la rentabilidad en el sector, para ello considera que es necesario tener una producción a escala, algo que de momento no se tiene.
“Para que los robotaxis sean más atractivos que el transporte compartido tradicional, es fundamental el precio y esto va a estar determinado por la tecnología a gran escala”
Sara Nicolás, responsable de asuntos externos de Goggo Networks
Lo cierto es que muchos expertos en el tema consideran que el gran auge de los robotaxis podría terminar muy pronto, por lo que podríamos presenciar una muerte anunciada y un fracaso de la tecnología. Es muy claro que ningún inversionista busca colocar su dinero en algo que no proporciona las ganancias esperadas y que económicamente es poco rentable.