Revelan los trapos sucios del imperio publicitario de caja negra de Google; porno, piratería y muchas estafas

No existe una empresa en el mundo que obtenga más ingresos por anuncios publicitarios digitales que Google. Tan solo en 2021, sus ganancias por este concepto totalizaron 76.033 M€, una cantidad que duplica las cifras de 2020 y se espera que cuando se presente el informe de 2022, el aumento sea considerable.

Pero, según un reporte que publica esta semana propublica.org, detrás de este negocio hay una infinidad de prácticas sucias e ilegales que no están a la vista del público en general. En un amplio trabajo de investigación periodística se revela que junto a Google existe una amplia red de piratería y desinformación que saca provecho de las tendencias para aumentar el posicionamiento de las noticias.

Revelan los trapos sucios del imperio publicitario de Google

Uno de los elementos claves del estudio se basa en el sitio Conservative Beaver, uno de los que durante mucho tiempo publicó noticias falsas e inventadas. En el portal aparecía publicidad de Google y al parecer, por el alto tráfico que tenía cada uno de sus post, producía enormes cantidades de dinero. Debido a la presión de la opinión pública y a las amenazas de demanda, la empresa quitó los anuncios y la página fue desconectada.

Google’s $31B ad network places ads for brands like Nike & Sephora on sites filled with pirated manga. It continues to work with these sites even after removing millions of their pages from its search engine due to copyright infringement. https://t.co/2ifsjjQWoW

— ProPublica (@propublica) December 22, 2022

Al menos eso pensaron los internautas, pero no fue así. El dueño, identificado como Mark Slapinski, creó un nuevo sitio y según los periodistas, utiliza las mismas credenciales de acceso que en Conservative Beaver. Todo esto fue permitido por Google, ya que representa grandes dividendos para ambas partes. Por las reglas del contrato de servicios, la empresa no está obligada a revelar quiénes forman parte de su red de anuncios.

El hombre fue cuestionado por los investigadores y de inmediato negó que tuviera relación con un sitio de noticias falsas a la vez que replicó que cumple con estándares editoriales de primer nivel. La cara opuesta de lo que indica el reporte de prensa. Igual dijo el portavoz de Google Michael Aciman, quien agregó que las normas de confidencialidad no significan que se publique material de baja calidad. Aseguraron que la mayoría de los ingresos van a quienes no son anónimos y que al descubrir sitios piratas los expulsan de su programa.

Con todo, los periodistas sostienen que Google financia una amplia red de desinformación que pone en riesgo la salud pública del mundo. Dicen que los banners se colocan en espacios donde no deberían estar, lo que lleva a que personas inescrupulosas se lucren con publicaciones indecentes y que nada aportan a la formación de la humanidad. En el siguiente apartado, demuestran la manera cómo se utilizan los anuncios en sitios de dudosa reputación.

Porno, piratería y muchas estafas están siendo promocionadas por la gran G

Aunque Google prohíbe las publicaciones relacionadas con la pornografía o sexualmente explicitas, se observan anuncios en sitios de contenido para adultos. Eso lleva a que compañías importantes y pequeñas empresas no tengan un control de los lugares en los que se muestran sus servicios. No hay una forma de bloquearlos porque no hay una lista de los potenciales clientes.

Los negocios que pagan millones de euros para llegar a la audiencia que les interesan sus productos no saben si los nichos son apropiados. De acuerdo con los datos de una organización de protección digital, un 10% de los anuncios de una campaña van a sitios anónimos, de los cuales Google no proporciona información. Eso es una clara violación a la transparencia y responsabilidad que se debe tener con los socios.

Al parecer, Google quiere implementar unas mejoras en este campo y aunque no revelarán claramente quién es el propietario, habrá un código relacionado con el material que promueven que los compradores podrán bloquear. Eso se activará en cualquier momento de 2023 y podría ayudar a mejorar un poco los niveles de calidad del contenido. El especialista Ruben Schreurs no duda al declarar que en los actuales momentos la mayor parte del inventario de sitios afiliados al sistema de publicidad son basura.

🚨🚨🚨 Google’s ad business hides nearly all publishers it works with and where billions of ad dollars flow. We uncovered a network containing manga piracy, porn, fraud and disinformation. https://t.co/xdnXIM6q4X

— Charles Ornstein (@charlesornstein) December 21, 2022

Además del tema de la pornografía, Google tampoco hace nada para pausar la publicidad en páginas web que promocionan la piratería o publican contenido sin los debidos derechos de autor. Uno de los casos relevantes es el de PapayAds, un sitio que recibió 49 millones de anuncios en el plazo de un año. La página ofrece a los editores la posibilidad de ganar dinero al aumentar el tráfico de sus sitios y comparte los beneficios que recibe por promociones digitales.

Lo que se descubrió es que varios de los sitios afiliados promueven versiones ilegales de comics japoneses, películas sin derecho de autor y pornografía. PapayAds dijo que solo brindan el servicio y que no se dieron cuenta que había violaciones de la legalidad en muchos de ellos. Sin embargo, no asumieron que utilizan bots para aumentar las ganancias. Estos elementos automatizados inflan los números de vistas a los anuncios, lo que a la vez se traduce en fraude para los anunciantes.

En un momento dado, Google se dio cuenta de las operaciones y les retuvo los ingresos, basados en sus políticas de garantizar transparencia y detener el tráfico ilegal a los sitios web. Sin embargo, semanas después continuaron la relación laboral y aparecieron de nuevo los anuncios. Los voceros de PapayAds dijeron que ellos son intermediarios y que todos los portales que agrupan fueron aprobados tras cumplir las normas para ingresar a la red publicitaria.

Lo más seguro es que existan muchos casos como estos. Sitios que promocionan piratería, pornografía y que no respetan la seguridad y privacidad de los usuarios. A pesar de eso, cada vez que alguien ingresa puede ver los anuncios, los cuales producen miles de euros en ganancias y permiten a estas personas seguir con su trabajo de manera ilegal.