Científicos descubren que comer plátanos verdes y otros alimentos con almidón resistente reduce un 60% la probabilidad de heredar cáncer

En Reino Unido, el pasado 29 de julio, un grupo de científicos de la Universidad de Newcastle y Universidad Leeds, publicó un estudio que demuestra que ingerir alimentos con almidón resistente tiene un efecto preventivo sobre varios tipos de cáncer hereditarios y reduce el 60% de la probabilidad de padecer de dicha enfermedad. Este almidón abunda en alimentos como el plátano verde, guisantes y avena, por ejemplo.

Para obtener dichos resultados, los expertos realizaron el seguimiento a un ensayo clínico en el que participaron casi 1.000 pacientes con síndrome de Lynch, este fue ejecutado como un estudio longitudinal doble ciego. Lo que significa que, los protagonistas del análisis tenían desconocimiento sobre el grupo de tratamiento al que pertenecieron e incluso, el equipo de médicos también desconoció la asignación a los grupos de tratamiento.

Los plátanos verdes y el almidón resistente evitarán que sufras de cáncer hereditario

Un grupo de científicos de las Universidades de Newcastle y Leeds, en Reino Unido, a través de la revista “Cancer Prevention Research”, publicaron los resultados de un ensayo internacional y este presenta una solución certera para minimizar las probabilidades de padecer algún tipo de cáncer hereditario.

En medio de un ensayo longitudinal doble ciego, para efectuar el experimento llamado “CAPP2”, participaron 918 pacientes que sufren de Síndrome de Lynch, quienes consumieron una dosis diaria de almidón resistente durante dos años, aproximadamente.

El síndrome de Lynch es un trastorno hereditario que aumenta el riesgo de tener cáncer de colon, cáncer de endometrio y otros tipos de cánceres. Alrededor de 200.000 británicos padecen esta enfermedad genética, aunque menos del 5% saben que son portadores.

Tras cumplirse el tiempo del estudio y obtener los resultados, los expertos descubrieron que dicho almidón reduce una variedad de cánceres en más del 60%, lo cual es un avance importante para tratar los tumores cancerígenos que son difíciles de diagnosticar y no se pueden detectar a tiempo. A pesar de que no redujo los cánceres en el intestino, logró minimizar los cánceres gastrointestinales superiores (es decir, los cánceres de esófago, gástrico, vías biliares, páncreas y duodeno).

“Descubrimos que el almidón resistente reduce una variedad de cánceres en más del 60%. El efecto fue más evidente en la parte superior del intestino”.

John Mathers, profesor de Nutrición Humana en la Universidad de Newcastle.

Si bien, el almidón resistente o fibra fermentable, se define como un tipo de carbohidrato que no se digiere en el intestino delgado, ya que se fermenta en el intestino grueso y así, alimenta a las bacterias intestinales beneficiosas. Según reportan varias investigaciones, esto genera efectos fisiológicos beneficiosos en el organismo, en especial: Reducción de glucosa en la sangre, disminución del tiempo de transito intestinal y descenso de la cantidad del nivel de colesterol.

Entonces, como es capaz de cambiar el metabolismo bacteriano de los ácidos biliares y reducir estos tipos de ácidos que dañan el ADN y causan cáncer, el almidón resistente mengua el desarrollo de los tumores malignos.

Por consiguiente, entre 1999 y 2005, todos los pacientes que comenzaron a consumir almidón resistente cada día en un periodo de dos años, tuvieron efectos beneficiosos en torno al desarrollo de cáncer hereditario. En ese lapso de tiempo, un total de 463 personas ingirieron este almidón en polvo y gracias a ello, sólo se detectaron 5 casos nuevos de cáncer gastrointestinal. Por su parte, los otros 455 pacientes restantes del estudio, tomaron un placebo y registraron 21 casos del mismo tipo de cáncer.

“Cuando comenzamos los estudios hace más de 20 años, pensamos que las personas con una predisposición genética al cáncer de colon podrían ayudarnos a probar si podríamos reducir el riesgo de cáncer con aspirina o almidón resistente”.

John Mathers, director del ensayo y profesor de Nutrición Humana en la Universidad de Newcastle.

Sin embargo, tiempo después de sintetizar estos resultados, los propios científicos se enfocaron en realizar un estudio a largo plazo, para así verificar su efecto en el futuro y poder hacer un arduo seguimiento a cada paciente, con el fin de publicar un resultado mucho más certero.

Gracias a esto, otra de las conclusiones del trabajo de las Universidades de Leeds y Newcastle, es que la protección se prolonga durante 10 años, después de consumir el suplemento. Lo cual, resulta beneficioso tanto para los pacientes con síndrome de Lynch como para el resto de personas del común.

Comer un plátano verde al día y no abusar de los antibióticos te hará menos propenso a padecer cáncer

En base a esta investigación, se puede asegurar que el consumo de almidón resistente reduce el riesgo de heredar una enfermedad como el cáncer. Por lo tanto, se recomienda que las personas, independientemente si no sufren de Síndrome de Lynch, opten por consumir una dosis diaria de este suplemento en polvo, tal y como señalan los científicos del estudio en cuestión.

No obstante, también pueden optar por comer plátanos verdes todos los días, ya que este alimento contiene 24.82% de almidón resistente y 73.42% de almidón total. En efecto, es una fuente de prebióticos de gran importancia, lo que significa que la parte más sustancial de almidón que resiste a la digestión, se introduce en el intestino y es allí donde sirve de alimento para la flora bacteriana que habita en él. Esto, ayuda a disminuir las probabilidades de padecer cáncer hereditario hasta en un 60%.

Adicional a ello, existen otros alimentos que permiten consumir el almidón resistente de forma natural y no como un suplemento. Entre ellos, hacemos énfasis en: Los guisantes, la avena, los frijoles, el maíz, el arroz, la pasta, la patata cruda, etc. Con respecto a la dosis, está debe ser equivalente a comer un plátano verde entero, cada día. Sólo así, se puede resistir a la descomposición y llegar al intestino, en donde es capaz de cambiar el tipo de bacteria que se encuentra alojada allí.

 “Los resultados son emocionantes, pero la magnitud del efecto protector en el tracto gastrointestinal superior fue inesperada, por lo que se requiere más investigación para replicar estos hallazgos”.

Tim Bishop, genetista de la Universidad de Leeds y colaborador de la investigación en Reino Unido.

Por otro lado, también existen más métodos que permiten minimizar el riesgo de cáncer y uno de los más certeros, se basa en no abusar de los antibióticos. Según un estudio encabezado por el Congreso Mundial sobre el Cáncer Gastrointestinal, el excesivo consumo de antibióticos incrementa las probabilidades de padecer cáncer de colon hasta en un 49%, sobre todo en personas menores de 50 años.

En tal sentido, la Sociedad Española de Oncología Médica, proyecta que los casos diagnosticados de cáncer de colon en España, podrán elevarse a una cantidad de 43.370, puesto que, el consumo de antibióticos por parte de la población es preocupante.

Asimismo, un estudio publicado en la revista científica Journal of the National Cancer Institute, señala que más del 17% de las personas que ingieren estos medicamentos de forma continua (durante 6 meses, por ejemplo), tienen altas probabilidades de desarrollar tumores cancerígenos en el colon.