¡Tan propio de Elon! Musk va a mejorar el sistema de verificación de cuentas de Twitter pero tendrás que pagar una suscripción mensual

Ya comienzan a cambiar las cosas con la llegada de Elon Musk a Twitter, en algunos casos, y como es su costumbre, rodeado de polémica. Una noticia publicada en The Verge afirma que el sistema de verificación de cuentas cambiará muy pronto y el pago será más costoso que el actual.

La etiqueta azul, que significa que la cuenta está verificada y es real, es utilizada normalmente por políticos, cantantes famosos, actores, empresarios, periodistas y otras personalidades reconocidas, así como entes públicos. Es un modo de probar que la información que se transmite es confiable o que se trata de una fuente certificada. Sin embargo, para Musk, esta debe ser una nueva forma de ingresos frecuente y segura para la compañía.

Musk podría aplicar una tarifa mensual para las cuentas de famosos en Twitter verificadas

El sistema de verificación que utiliza la red social lleva el nombre de Twitter Blue. Está disponible en la actualidad para Estados Unidos, Nueva Zelanda, Australia y Canadá por un precio de 4,99€ al mes. Pero esto, según los informantes, pasará a la historia pues la propuesta de Musk es que en lo adelante tenga un costo de 19.99€, con la meta inmediata de alcanzar la cifra de 69 millones de afiliados.

El primer cambio de Twitter es cobrar por las cuentas verificadas, dice el medio The Verge: Elon Musk ha solicitado que el servicio Twitter Blue (suscripción) pase de 4,99 a 20 dólares. Quienes no se suscriban perderán su “chulito azul”.

— Alejandro Marin (@themusicpimp) October 31, 2022

La polémica no solo viene por el tema del precio, que para muchos suscriptores es elevado, sino también porque quienes tienen la etiqueta en la actualidad contarán con un plazo de 90 días para cancelar la nueva tarifa o de lo contrario perderán su estatus. Al parecer, la idea es asegurarse de que las cuentas que están verificadas no se traten de bots, por lo que los usuarios reales tendrán que realizar el proceso de forma rápida.

Es una de las medidas que ha tomado Musk en los primeros días como jefe de Twitter. Los usuarios inactivos o desconectados de la red social han visto el cambio de su página de inicio. Además, hay una lista negra en la que se encuentran ingenieros y otros miembros del personal que serán despedidos en las próximas semanas debido a que no realizan ningún aporte significativo a la empresa aparte de varios proyectos de renovación de imagen.

De todas maneras, quedan unos siete días antes de que se presente el proyecto definitivo y es allí donde se sabrá el nuevo mecanismo de generar ganancias para la empresa. Pero se debe tener en cuenta que una encuesta de una firma norteamericana muestra que muchas personas no estarían dispuestas a pagar esa cantidad de dinero por estar verificadas, aunque no se explican del todo las razones de tal decisión.

¡Ya salió el primer espantado! General Motors pausa sus campañas de anuncios pagados en Twitter

Mientras la compañía evalúa sus nuevas medidas y toma las acciones que les parecen convenientes para solucionar cualquier problema económico, los clientes están a la expectativa para evaluar a la distancia los acontecimientos. Un reporte de CNBC destaca que en el gigante automotriz, General Motors, decidió parar la inversión en publicidad momentáneamente, aunque seguirán presentes en la plataforma para informar de sus novedades y responder las inquietudes.

¿Por Elon Musk? General Motors pausa toda su publicidad en Twitter #GeneralMotors #Twitter #TwitterTakeover #FelizSabado https://t.co/6tPe2GByfH pic.twitter.com/Lv3uiFVSdD

— hiramnoriega.com (@hiramnoriegacom) October 29, 2022

Hasta el momento, no se sabe cuál es la inversión publicitaria que la marca hacía en Twitter, aunque un portavoz aseguró que tienen bastante tiempo desde que no contratan anuncios, incluso mucho antes de que se vendiera la red social. Pero todo parece indicar que General Motors y otros fabricantes de autos actúan con cautela debido a que Tesla, uno de los competidores que va en crecimiento, es propiedad de Musk.

En un post en su cuenta personal de Twitter, el magnate escribió que se ha especulado mucho sobre la forma como manejará la publicidad, pero que la mayoría de los comentarios están mal. Dijo que la plataforma tiene que ser un mejor lugar para todos y no un infierno, con lo que intentó calmar las aguas y recuperar la confianza en los anunciantes, que son la principal fuente de ingreso de la red.

Los periodistas de CNBC contactaron a otros presidentes de empresas automotrices, si bien en la mayoría de los casos no recibieron respuestas a los cuestionarios enviados. Por su lado, se espera que se realice un consejo de moderación de contenido en el que se establezcan las nuevas políticas de publicación de Twitter, para ver hasta qué punto llegará la anunciada libertad de expresión que hizo Musk cuando presentó la oferta de compra.

Lo cierto, es que el nuevo dueño de Twitter mantiene la incertidumbre entre los usuarios. A principios de año, los aparentes cambios en la política llevaron a que Henrik Fisker, director de una de las empresas fabricantes de autos eléctricos, cerrara su perfil personal. Aseguró en su momento que era la mejor decisión y que no había planes de revertirla. En la otra acera, hay unos como Nikola, ensambladora de camiones eléctricos, que piensan mantener su misma postura.

Al revisar un poco la política que ha tenido Tesla en torno a los anuncios publicitarios, se ve que la inversión ha sido muy poca. Siempre han manifestado que tienen otros métodos que son más efectivos para dar a conocer sus productos, tales como la cobertura de los medios tradicionales en los eventos de presentación y el llamado boca a boca, lo que según ellos les permite ahorrarse mucho dinero en marketing y promociones.

Sin embargo, si uno de los principales accionistas es también el dueño de Twitter, las cosas pueden cambiar de un momento a otro y si no hay un buen manejo de las comunicaciones y acuerdos, podrían comenzar acusaciones como las que se han realizado contra Amazon, de que favorece sus productos por encima de los de la competencia. Pero esto último es solo especulación, la normativa y el control que se haga es quien dirá si las preocupaciones eran ciertas.