¿Para qué sirve? Acabamos de descubrir una nueva estructura anatómica en el cerebro humano que no sabíamos que existe

Hace tan solo algunos días un grupo de científicos descubrió un nuevo componente del cerebro humano que era totalmente desconocido hasta ahora y que aún quedan muchas cosas por conocer de este hallazgo. La investigación ha estado dirigida por la neurocientífica Maiken Nedergaard, codirectora del Centro de Neuromedicina Traslacional de la Universidad de Rochester, Estados Unidos.

Durante todo el estudio estuvo acompañada de Kjeld Mollgard, profesor de neuroanatomía de la Universidad de Copenhague. Es así, como este hallazgo ha sido publicado en la revista Science y allí se describe la nueva estructura anatómica del cerebro humano, por lo que la gran duda ahora es ¿para que sirve? y ¿cómo podemos aprovecharlo?

Descubrimos nueva estructura anatómica en el cerebro

Tanto Nedergaard, Mollgard y sus colegas han logrado cambiar la manera es como se puede comprender el cerebro humano a través de hallazgos muy importantes en el campo de la neurociencia. Es así, como ahora se han estudiado con mayor atención aquellos detalles de muchas de las funciones críticas de las células llamadas glía que antes se pasaban por alto.

De manera que este nuevo componente hallado y que es previamente desconocido de la anatomía del cerebro actúa como una plataforma desde la cual las células inmunitarias vigilan el cerebro en busca de infecciones e inflamación, por lo que tienen un papel de una barrera protectora.

Por lo tanto, gracias a este estudio y los resultados obtenidos que están disponibles para todos, se ha podido transformar la comprensión de la mecánica fundamental del cerebro humano y con ello realizar aportes importantes en las próximas investigaciones de la neurociencia.

Es así, como a través del estudio publicado se hace mención a que se trata de un proceso único de eliminación de residuos del cerebro, el cual ha sido denominado por el laboratorio como “Sistema glinfático”. Los científicos también han explicado que este descubrimiento de una nueva estructura anatómica se encarga de segregar y ayudar a controlar el flujo del líquido cefalorraquídeo (LCR) dentro y alrededor del cerebro.

Por lo tanto, gracias a esto es posible apreciar de manera más sofisticada el papel que desempeña el LCR tanto en la eliminación de residuos del cerebro, en el transporte y en el apoyó a sus defensas inmunitarias.

“El descubrimiento de una nueva estructura anatómica se segrega y ayuda a controlar el flujo del liquido cefalorraquídeo. Gracias a esto ahora podemos obtener estudios más avanzados y más completos, por lo que podremos conseguir resultados más precisos para las investigaciones relacionadas con el cerebro humano”

Maiken Nedergaard, codirectora del Centro de Neuromedicina Traslacional de la Universidad de Rochester, Estados Unidos

Hay que mencionar que la investigación ha estado basada en las membranas que envuelven el cerebro humano, las mismas son capaces de crear una barrera con el resto del cuerpo, por lo que lo mantienen cubierto en líquido cefalorraquídeo. Por lo tanto, se trata de una barra protectora formada por capas individuales que se conocen como aracnoides, duramadre y piamadre.

El estudio ha señalada que esta nueva capa hallada se encarga de dividir aún más el espacio debajo de la capa aracnoidea, el espacio subaracnoideo, en dos compartimientos, los cuales están separados por la capa ya mencionada, la cual ha sido denominada SLYM.

Membrana subaracnoidea de tipo linfático (SLYM), la cual es un tipo de membrana llamada mesotelios que recubre otros órganos del cuerpo, incluido los pulmones y el corazón para protegerlos a medida que alberga las células inmunitarias. La misma es bastante fina y delicada y consta de una o unas pocas células de grosor, pero es capaz de crear una barrera hermética que solo permite el paso de moléculas muy pequeñas que parece separar el LCR.

Lo cierto es que tras este descubrimiento publicado en la revista Science todo indica que SLYM también es importante para la defensa del cerebro y que son exclusivas de este órgano y que a partir de ahora supone un nuevo inicio de investigaciones que permitan a los científicos conocer con mayor exactitud su comportamiento.

“Parece albergar su propia población de células inmunitarias del sistema nervioso central que utilizan a la SLYM para la vigilancia en la superficie del cerebro, lo que le permite escanear el LCR que pasa en busca de signos de infección”

Maiken Nedergaard, codirectora del Centro de Neuromedicina Traslacional de la Universidad de Rochester, Estados Unidos

Este descubrimiento de una nueva estructura en la anatomía del cerebro abre la puerta a nuevos estudios sobre las enfermedades cerebrales, esto gracias a que los investigadores han logrado detectar que la membrana es capaz de congregar concentraciones mayores y más diversas de células inmunitarias durante la inflamación y el envejecimiento.